Las personas que son acosadas en el trabajo o experimentan violencia en el trabajo corren mayor riesgo de tener problemas con los vasos sanguíneos del corazón y el cerebro, incluidos ataques cardiacos y accidentes cerebrovasculares, según un estudio prospectivo que analizó esa vinculación, publicado en el European Heart Journal.
La directora del estudio, Tianwei Xu, estudiante de Doctorado de la Universidad de Copenhague, Dinamarca, apunta: "Si existe un vínculo causal entre la intimidación o la violencia en el trabajo y la enfermedad cardiovascular, la eliminación de la intimidación en el lugar de trabajo significaría que podríamos evitar el cinco por ciento de todos los casos cardiovasculares, y la erradicación de la violencia en el trabajo evitaría más del tres por ciento de todos los casos".
¿Cómo encontraron esa relación?
Los investigadores analizaron datos de 79 mil 201 hombres y mujeres que trabajaban en Dinamarca y Suecia, con edades entre 18 y 65 años, sin antecedentes de enfermedad cardiovascular (ECV), que participaron en tres estudios que comenzaron entre 1995 y 2011. Los participantes han sido seguidos desde entonces.
Xu y sus colegas también tuvieron en cuenta otros factores que podrían afectar a si los participantes se vieron afectados o no por enfermedad cardiovascular (ECV), como el índice de masa corporal (IMC), el consumo de alcohol, el tabaquismo, los trastornos mentales y otras afecciones de salud preexistentes, el trabajo por turnos y la ocupación.
El nueve por ciento de los participantes informaron de haber sido acosados en el trabajo y el 13 por ciento declaró haber experimentado violencia o amenazas de violencia en el trabajo en el último año. Después de ajustar los datos por edad, sexo, país de nacimiento, estado civil y nivel de educación, los investigadores encontraron que aquellos que fueron acosados o experimentaron violencia (o amenazas de violencia) en el trabajo tenían un riesgo un 59 y 25 por ciento mayor de ECV, respectivamente, en comparación con las personas que no estuvieron expuestas a bullying.
Las personas que informaron de haber sido acosadas con frecuencia (lo que equivale a ser acosadas casi todos los días) en los últimos 12 meses tuvieron un 120 por ciento más de riesgo de ECV, mientras que las que fueron expuestas con mayor frecuencia a la violencia en el lugar de trabajo tuvieron una 36 por ciento más de riesgo de enfermedad cerebrovascular (como un accidente cerebrovascular) que quienes que no están expuestos a la violencia. Sin embargo, no parece haber un aumento correspondiente en la enfermedad cardiaca.
"Estos eventos estresantes están relacionados con un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular en forma de dosis-respuesta; en otras palabras, cuanto mayor es la exposición al bullying o la violencia, mayor es el riesgo de enfermedad cardiovascular, explica Xu.
mrf