Derivado de la pandemia generada por el virus SARS-COV-2 y el suicidio de un paciente que fue diagnosticado con covid-19 en el Hospital General de Tula de Allende, se buscarán fortalecer aún más las acciones en materia de salud mental y atención psicológica en todo el estado, esto para evitar que se pueda replicar esta situación.
Estas acciones para fortalecer la salud mental iniciaron desde el pasado 3 de febrero, informó la coordinadora estatal de salud mental en el primer nivel de atención de la Secretaría de Salud de Hidalgo (SSH), Patricia Vega López.
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Tras una reunión con especialistas en este rubro se elaboró un plan de acción dirigido a tres grupos focales de la población para los cuales llevan a cabo tres brigadas de salud.
La primera brigada, detalló Vea López, se encuentra integrada por un médico y una enfermera de salud mental, quienes otorgan primeros auxilios psicológicos, además de que tienen la oportunidad de trabajar en las cabeceras municipales de las 84 demarcaciones del estado, donde se tienen los niveles básicos de salud mental; en un segundo plano se cuenta con brigadas fortalecidas: un médico, una enfermera y un psicólogo, estos grupos de atención se ubican donde hay áreas de atención psicológica, como la jurisdicción de Pachuca, Tulancingo, Tula, Zimapán, Huichapan, Atotonilco y Huejutla, mientras que en las otras regiones se mantiene el trabajo con las brigadas básicas.
De igual forma se cuenta con el apoyo de 14 psiquiatras en todo el estado, 12 de ellos están concentrados el Hospital Psiquiátrico Villa Ocaranza en San Miguel Eyecalco, y dos restantes en la jurisdicción Pachuca para atender cualquier urgencia, mismas que se dividen en tres posibles escenarios: “uno, que una persona tenga una agitación psicomotriz, es decir que en ciertos movimientos no se puede controlar más que con un fármaco; dos, que un paciente que ya se tenga con diagnóstico de salud mental en algún momento tenga la negativa de tomar el medicamento; y tres, un intento de suicidio o alguna intención homicida, es decir causar daño a otra personas; esas son las situaciones que son urgencias psiquiátricas”, puntualizó Vega López.
El plan de acción también está organizado para atender a tres grupos blanco, reiteró, “uno es el personal de salud que se está viendo gravemente rebasado en sus competencias emocionales, pues hay personas que están muy estresadas y cansadas en las unidades de salud y se les está otorgando un apoyo para su salud emocional, por lo regular los responsables de salud mental están haciendo un sondeo de todas las unidades de salubridad para atender a estos trabajadores”.
Otro grupo más son los pacientes que ya se tienen en control, algunos que ya están diagnosticados con algún trastorno mental y que por esta contingencia estén presentando una crisis; finalmente la población en general, “pues hemos contado con apoyos desde nivel federal, a través de promoción de la salud y con información donde se busca reducir el estrés en adultos, adolescentes, niños y niñas, así como para estar identificando las recomendaciones generales para quienes que estén en casa en resguardo y que no presenten algún cuadro de depresión o ansiedad que pueden ser causa de suicidios”, añadió.