Aunque la enfermedad de Parkinson aún es no curable, el Tecnológico de Monterrey apostó a la innovación tecnológica para el tratamiento, y a partir del mes de marzo realizan en el Centro de Parkinson y trastornos del movimiento del Tec Salud, cirugías de estimulación cerebral profunda con electrodos bidireccionales.
Con lo cual, explicó el doctor Fortino Salazar Salazar, neurocirujano del Sistema Tec Salud, este Centro se convirtió en el primero en el país en realizar la citada intervención.
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“El mes pasado, en marzo, hicimos una innovación con estos tratamientos al ser el primer Centro en implantar unos electrodos nuevos que se llaman bidireccionales.”
“Es decir, son electrodos que tienen la capacidad de enviar impulsos eléctricos para este tratamiento, pero también tienen la capacidad de censar o detectar los impulsos eléctricos de las partes profundas del cerebro donde están colocados y con eso poder modificar o ajustar mejor el tratamiento, y obtener mejores resultados para el control de los síntomas de los pacientes”, destacó.
Los pacientes con Parkinson, compartió, son tratados de varias formas, con medicamentos, con terapia física, con rehabilitación, pero cuando ya hay una progresión de la enfermedad y que ya no pueden ser mejorados con esto, se considera la opción de la cirugía para Parkinson de estimulación cerebral profunda.
Esta cirugía tiene más de 15 años de practicarse en Tec Salud y con ella han logrado una mejora en la calidad de vida de los pacientes.
En ambos tipos de cirugías, comentó Salazar Salazar, se realiza un perfil previo del paciente para detectar si son candidatos a este tipo de tratamiento.
“Aquí en el Tec Salud, en el Instituto de Neurología, tenemos más de 15 años realizando este tipo de operaciones de implante de electrodos cerebrales profundos, en los cuales, estos cables que van en cierta parte profunda del cerebro están conectados a un neuroestimulador que les está enviando impulsos eléctricos para modular la actividad de las neuronas, y mejorar los síntomas del movimiento del Parkinson.”
“Entonces, esto ayuda considerablemente a mejorar la calidad de vida y a bajar la dosis de medicamentos”, puntualizó el especialista.
La enfermedad de Parkinson, enfatizó, es la segunda causa de enfermedades neurodegenerativas crónicas del sistema nervioso, y se considera que aproximadamente 50 personas por cada 100 mil habitantes por año en México tienen riesgo de padecerla, esto según estadísticas del Instituto Nacional de Neurología y Neurocirugía “Manuel Velasco Suárez”.
Es una enfermedad que, recalcó, no solo afecta a personas mayores o ancianas, y en cuestión de género existe un promedio de 1.2 casos en hombres por cada caso que se presenta en mujeres.
Esta enfermedad, explicó, produce dos tipos principales de alteraciones, una que tiene que ver con los movimientos de la persona y los síntomas frecuentes en cuanto a movimiento puede ser un temblor de reposo, y puede empezar con rigidez y lentitud para hacer movimientos. Y la otra, agregó, las alteraciones al caminar.
Aunque, añadió, la enfermedad puede producir síntomas no motores que pueden ser la pérdida de olfacción, estreñimiento crónico, problemas para orinar, de la constipación, alteración del sueño, insomnio y depresión.
Una parte a considerar, concluyó, es que los familiares o cuidadores también requieren de algún apoyo, por lo que en este lugar también se brinda ayuda a estas personas.
Recientemente, una paciente de 65 años de edad que no respondía al tratamiento convencional, reaccionó con éxito al procedimiento de implantes de electrodos bidireccionales de Estimulación Cerebral Profunda.