Tras más de un año del incendio que afectó a la Escuela de Nivel Medio Superior Centro Histórico en León, donde más de mil 500 estudiantes no han podido regresar de manera plena a sus clases presenciales, un grupo de exalumnos aseguró que el inmueble es seguro y podría utilizarse nuevamente sin que los jóvenes corran riesgo.
Con base en un dictamen elaborado por ingenieros y arquitectos, solicitaron una visita conjunta con autoridades universitarias para corroborar las condiciones actuales del edificio.
La mañana de este martes, alrededor de las 9:00, exalumnos y padres de familia realizaron una manifestación pacífica afuera del plantel. Con pancartas donde se leía “Reapertura Ya” y “Autoridades Reprobadas”, exigieron a la Universidad de Guanajuato (UG) que presente su propio dictamen estructural para compararlo con el análisis que ellos ya entregaron.
Señalaron que han solicitado esta información en diversas ocasiones, pero afirman que la respuesta institucional ha sido de “indiferencia”.
Miguel Ángel García Gómez, doctor en arquitectura y exalumno del plantel, explicó que la visita técnica se llevó a cabo en junio de este año junto con autoridades de la escuela.
“El dictamen concluyó básicamente en que el edificio no debía demolerse, ya que estructuralmente es seguro, y esto de alguna manera es un punto diferente al de la universidad que había anunciado que era inseguro. El dictamen recomienda un reforzamiento estructural y volver a ocupar. Entregamos el dictamen a la universidad y decidió analizarlo”, señaló.
Indicó que el área dañada corresponde al auditorio, que representa aproximadamente el 25% de las instalaciones totales, por lo que considera injustificado mantener cerrado el 75% restante.
“Nosotros lo que queremos abonar es a la comprensión de lo que realmente ocurrió con el incendio, a la comprensión del riesgo real que puede significar la estructura del edificio en la parte de su auditorio. Para esto demandamos que la universidad permita una visita compartida con padres de familia, el equipo técnico de la universidad y nosotros, para que juntos conozcamos las condiciones reales del edificio”, puntualizó.
Durante cerca de una hora, los manifestantes corearon consignas como “¡Reapertura, reapertura!” y adelantaron que seguirán presionando hasta obtener una respuesta concreta. Anunciaron que próximamente llevarán a cabo una nueva movilización.
El incendio ocurrió el 11 de noviembre de 2024 y consumió casi en su totalidad el auditorio principal del plantel, dañando butacas, mesas y el escenario. Bomberos y Protección Civil controlaron el fuego y se reportaron únicamente pérdidas materiales en esa zona.