La desaparición de un joven estudiante naval originario de Tampico ha marcado profundamente a su familia, que enfrenta las fechas decembrinas con angustia, incertidumbre y una búsqueda que no se detiene. Mientras las celebraciones comienzan a llenar calles y hogares en México, el caso de Miguel Darío Becerra Chávez vuelve a evidenciar el dolor de quienes esperan que su ser querido regrese a casa.
Miguel, de 22 años, desapareció en plena formación profesional en la Ciudad de México. Desde mediados de octubre, su familia ha permanecido entre oficinas, calles y redes sociales tratando de seguir pistas, exigir respuestas y hacer visible su caso ante la autoridad y la ciudadanía.
Lo que se sabe sobre la desaparición del cadete tampiqueño
De acuerdo con información oficial, Miguel Darío Becerra Chávez fue visto por última vez el 20 de octubre de 2025 en la colonia Los Cipreses, alcaldía Coyoacán, en la Ciudad de México. Ese día salió rumbo al hospital donde realizaba sus prácticas, pero nunca llegó a su destino.
La Fiscalía General de Justicia de la CDMX y la Comisión de Búsqueda de Personas emitieron el reporte oficial con el folio DI/03209/2025/FGJ, en el que se detalla:
- Edad: 22 años
- Estatura: 1.62 metros
- Lugar de desaparición: colonia Los Cipreses, Coyoacán
- Último lugar donde se le vio: Calle Virgilio Uribe
- Vestimenta: chamarra negra, pantalón negro, camisa blanca, tenis negros
- Señas particulares: cicatriz en la cabeza
Miguel es cadete del quinto año de la Escuela Naval y, aunque nació en Nayarit, su familia reside desde hace años en Tampico. Tras confirmarse su desaparición, sus padres y hermanos se trasladaron a la capital del país para participar en las labores de búsqueda, distribuir la ficha y acompañar el proceso ante la autoridad.
El mensaje de la madre: dolor, culpa y una súplica en Navidad
En redes sociales, la madre de Miguel escribió uno de los mensajes más desgarradores desde el inicio de su búsqueda. Para ella, esta temporada decembrina no representa celebración, sino un recordatorio constante de la ausencia de su hijo.
“Esta navidad es la más triste de todas, como mamá me siento tan culpable por no hacer más, estoy con el corazón quebrado, el alma hecha pedazos y un sin fin de noches de insomnio donde lo único que hago es llorar. Seguimos en tu búsqueda hijo mío, una búsqueda que será imparable”, expresó.
En otro mensaje, volvió a pedir el apoyo de la ciudadanía:
“México, necesitamos respuestas. Necesitamos ver las búsquedas que ustedes han hecho. Hay una familia que sufre por la ausencia de un hijo. Difundan, no se cansen por lo que más quieran”.
Su llamado se ha replicado entre amigos, compañeros de Miguel y usuarios que se han sumado a la difusión de la ficha de búsqueda, con la esperanza de obtener información que permita dar con su paradero.
La familia continúa en la CDMX y pide apoyo para localizarlo
Desde octubre, los familiares permanecen entre recorridos, entrevistas, revisión de cámaras y reuniones con autoridades. Aseguran que no dejarán de insistir hasta encontrar respuestas claras sobre lo ocurrido con Miguel Darío.
Su caso forma parte de las decenas de reportes que cada mes se realizan en la Ciudad de México, aunque su familia insiste en que no debe quedar en el olvido. Para ellos, cada día es crucial y cada testimonio, mensaje o fotografía compartida puede ser determinante.
Quienes tengan información sobre el paradero del joven pueden comunicarse a los números oficiales de emergencia o a la Comisión de Búsqueda de Personas, donde se mantiene activo el expediente.