Cada año, en los días previos al 12 de diciembre, las iglesias de Tampico comienzan a recibir a decenas de creyentes que acuden para agradecer, pedir y celebrar a la Virgen de Guadalupe. En esta ocasión, el ambiente volvió a llenarse de flores, veladoras y plegarias, mientras la comunidad católica se organizó para cantarle las tradicionales mañanitas y realizar recorridos por distintas colonias.
En la Catedral de Tampico, así como en la parroquia Nuestra Señora de Guadalupe ubicada en la colonia Jesús Elías Piña del sector Infonavit, las muestras de fe se hicieron presentes desde temprana hora y continuaron hasta entrada la noche. Familias completas, jóvenes y adultos mayores participaron en actividades previas al esperado Día de la Virgen.
Celebración en la Catedral de Tampico
La explanada de la Catedral se convirtió en un punto de reunión para decenas de personas que llegaron con flores en mano para agradecer favores recibidos relacionados con la salud, el trabajo o el bienestar de sus familias. Entre cánticos y oraciones, los fieles elevaron sus peticiones mientras esperaban el inicio de las mañanitas.
El ambiente estuvo marcado por la devoción y la emoción de quienes año con año acuden a venerar a la Morenita del Tepeyac. Algunos asistentes aseguraron que esta fecha marca un momento de reflexión y renovación espiritual que los acompaña durante todo el año.
Peregrinación en la colonia Infonavit-Cañada
La celebración también se vivió intensamente en la parroquia Nuestra Señora de Guadalupe, ubicada en la colonia Jesús Elías Piña, donde los devotos iniciaron una peregrinación por las principales calles del sector.
El recorrido fue encabezado por el presbítero Jesús Manuel Pérez, acompañado por más de un centenar de creyentes y un grupo de danzantes conformado por niños, jóvenes y adultos. Con vestimentas tradicionales, sonajas y coreografías guiadas por la fe, el grupo llenó las calles de ritmo y alegría.
Los vecinos salieron a las banquetas para observar el paso de la peregrinación, algunos sumándose al contingente y otros entregando flores como muestra de respeto.
Tras el recorrido, la comunidad ingresó a la parroquia para continuar el festejo con la danza tradicional dentro del recinto. El Padre Jesús Pérez dio la bendición a los danzantes, reconociendo su dedicación y el esfuerzo con el que año tras año participan en estas celebraciones.
Mañanitas y misa comunitaria
Al finalizar la danza, los asistentes participaron en la Santa Misa, donde el sacerdote hizo un llamado a la unidad familiar, a la solidaridad con quienes atraviesan momentos difíciles y a mantener viva la tradición guadalupana.
La celebración culminó con agradecimientos por parte de los organizadores y con un ambiente cargado de esperanza, fe y convivencia entre la comunidad.