Dos peleas registradas recientemente entre estudiantes del CETis 109 de Ciudad Madero volvieron a encender las alertas en el sur de Tamaulipas sobre el comportamiento de los jóvenes y el manejo de sus emociones dentro del plantel.
El director, Jorge Vladimir López Beltrán, informó que se activó el protocolo interno de seguimiento mediante un comité conformado por cinco docentes, lo que derivó en la suspensión de tres alumnos involucrados en las confrontaciones.
Aunque el plantel cuenta con prefectos, López Beltrán explicó que la vigilancia total es prácticamente imposible debido a la extensión del plantel, la cantidad de estudiantes —más de tres mil— y las diversas funciones que desempeña el personal operativo.
Joven quería lanzarse de un segundo piso
La situación se agravó este martes, cuando un alumno de tercer semestre intentó arrojarse del segundo piso para quitarse la vida. Una maestra que se encontraba cerca observó el riesgo, logró acercarse, ganar la confianza del joven y evitar que concretara el intento.
De inmediato se notificó a los familiares, quienes acudieron al plantel para dialogar sobre el estado emocional del estudiante. Posteriormente fue canalizado a atención especializada.
López Beltrán señaló que este es el primer caso dentro del plantel en el que un alumno intenta hacerse daño. No obstante, a lo largo del ciclo escolar varios jóvenes han sido canalizados a instancias como el DIF y el Centro de Integración Juvenil para recibir apoyo psicológico, aunque no se precisó la cifra.
El director resaltó que muchas conductas que se manifiestan en conflictos, impulsividad o reacciones extremas suelen tener su origen en situaciones familiares que los adolescentes arrastran al entorno escolar.
Indicó que las emociones no gestionadas encuentran salida en la convivencia diaria y recordó que, pese a las campañas de prevención y los protocolos activos, ninguna escuela tiene la capacidad de contener por sí sola todas las problemáticas socioemocionales que viven los estudiantes.
Finalmente el dirigente reiteró el llamado a madres, padres y tutores para fortalecer el acompañamiento emocional desde casa, ya que el bienestar del alumnado depende de un trabajo conjunto entre las familias y la institución.
yc