Buscar trabajo para personas mayores de 50 años se ha vuelto todo un reto, pues además de enfrentar los índices de desempleo, deben de confrontar los prejuicios respecto a su salud, su capacidad para adaptarse a las nuevas tecnologías o a la idea de falta de productividad. Estos prejuicios han provocado que el 90 por ciento de las ofertas de trabajo excluyan a personas mayores de 35 años de acuerdo con datos del Conapred.
Tal es el caso de Felicia Serrano y César Maldonado, quienes perdieron su empleo a raíz de la pandemia. Felicia tenía su propio emprendimiento dedicado a las ventas, pero la situación sanitaria le impidió mantener a flote su negocio. César se dedicaba a las tutorías académicas y desde mediados del año pasado, se encontró en situación de desocupado.
“Realmente hay pocas oportunidades para personas de 50 años o más, de hecho, en ninguna fuente de trabajo o red social de trabajo se buscan a personas de 50 años o más. Es muy difícil encontrar trabajo”, comentó César. “Busqué trabajo por internet y utilicé los filtros en donde uno pone la edad que tiene y desgraciadamente me llegaban, desde hace seis meses, muchísimos, pero solicitando puestos de 35 o hasta 45 años, entonces sinceramente me desanimé bastante”, agregó Felicia.
De acuerdo con información de 2022 proporcionada por el Inegi en su Encuesta Nacional de Empleo, 2 millones de personas que pertenecen a la Población Económicamente Activa (PEA) del país se encuentran desocupadas. De este universo, el 20 por ciento son personas que se encuentran entre 45 y 64 años.
En este contexto, la empresa Popeyes, que cumple 50 años este 2023, ha lanzado una iniciativa para contratar a personas de 50 años en adelante, y así, aprovechar que, además los años, tienen la experiencia para hacer las cosas a mano y con amor dentro de las más de 20 sucursales que tienen en CdMx, Jalisco y Monterrey. Para ser parte, solo se debe ingresar a: popeyesmas50.mx.
“Queríamos hacer algo especial para nuestro aniversario. Identificamos una problemática de la sociedad mexicana y quisimos poner nuestro granito de arena. Sabemos que esta iniciativa no sólo beneficiará a las personas contratadas, sino también a sus familias” destacó Thiago Capitani, General Manager Latinoamérica y Caribe de Popeyes.
Desde enero pasado, Felicia y César laboran en sucursales de la cadena, en la Ciudad de México y se encuentran satisfechos, ya que se sienten útiles e incluidos en sus ambientes de trabajo. A la fecha, el 10 por ciento de la plantilla laboral de Popeyes es de personas de 50 años en adelante y tienen sus puertas abiertas para que más trabajadores se sumen a la iniciativa.
“Es una decisión muy atinada desde el punto de vista social. Creo que nos hacen falta muchas empresas con ese toque humano y, por otro lado, que es quizá lo más profundo es nuestra percepción porque no se imaginan el sentir de uno con tantos años de trabajo, tanta experiencia, tanta capacidad que uno sabe que tiene y de repente nos cierren la puerta porque ya no tenemos la edad”, subrayó Felicia.
“Para mí es mucho muy importante el seguir siendo autónoma, que no tenga que estarles pidiendo a mis hijos para lo más elemental. Creo que esta es una decisión muy atinada de la empresa, muy humana. Empiezo a sentirme capaz y yo misma me sorprendo al ver que sí puedo y ver que puedo ayudar, en lo personal me sorprendo gratamente”, agregó.
50 años de experiencia
Popeyes nació en Louisiana, Estados Unidos, en 1972 y desde entonces ha consolidado una historia de tradición culinaria que toma como base la cocina criolla y cajún, y mezcla la comida especiada, europea y local.
La empresa tiene planeado abrir 300 tiendas en el país en los siguientes 10 años al considerar a México como un mercado prioritario en la región. “Vemos un futuro muy favorable para la consolidación de la marca en México. Hemos tenido muy buena recepción de la población mexicana para la marca acá y hemos, en algunas ciudades como Monterrey, tenido sold out en el primer día de ventas”, enfatizó Thiago Capitani.
“Sabemos que el éxito de la marca se debe a su historia y oferta gastronómica, por lo que con base en dos de los valores más importantes: experiencia y hacer las cosas con amor, buscamos incluir a quienes cuentan con ellos, quienes saben que hacer las cosas con el corazón y paciencia es mejor, aquellos que saben que lo bueno toma tiempo y se hace esperar así como el marinado de nuestro pollo que se realiza a mano y por 12 horas”, agregó Capitani.
“Me parece que muchas empresas en realidad solo tienen el discurso de inclusión, dicen que son incluyentes, que no discriminan y aceptan a todas las personas, algunas ponen incluso que aceptan a personas de cualquier edad, pero en realidad y en la práctica no lo están cumpliendo, en realidad siempre es un grupo muy selecto de personas con cierta edad y cierta preparación y Popeyes en realidad sí lo está haciendo”, señaló César Maldonado.
RRR