La mesa directiva de la Academia de la Lengua (AML), encabezada por Gonzalo Celorio, se reunió por vez primera con los 22 académicos correspondientes con los que cuenta la institución, ubicados en diferentes estados del país, desde Quintana Roo hasta Baja California.
Una reunión más promisoria de lo que realmente ocurrió, comentó en entrevista el escritor, porque se convirtió en un primer acercamiento que sirvió lo mismo para explicarles lo que hace la academia en Ciudad de México, cuáles son los proyectos, cómo trabajan las comisiones, “para que ellos nos dijeran de qué manera pueden trabajar con nosotros”.
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“Vamos a hacerlos participar en la comisión de lexicografía, sobre todo en el gran nuevo diccionario de mexicanismos, que estamos por terminar, para que ellos puedan sancionar algunas palabras o algunas acepciones, que pueden ser pertinentes en su localidad; asimismo, les compartiremos las consultas que nos hace el público en general para ver si ellos quieren proponer, de acuerdo al habla de sus regiones, alguna observación o un nuevo uso, o matizar alguna respuesta”.
Además de Gonzalo Celorio, por parte de la mesa directiva de la AML participaron en la Primera Conferencia Nacional de Académicos Correspondientes (CNAC) Concepción Company, Adolfo Castañón, Felipe Garrido, Fernando Serrano Migallón, Alejandro Higashi y Aurelio González.
Los académicos correspondientes son elegidos por los numerarios, y como están localizados en muy diversas entidades de la república, no hay una relación muy estrecha con ellos, en palabras de Gonzalo Celorio, “y me había parecido un desperdicio, porque son corresponsales que tienen muchos méritos académicos, que tienen un gran prestigio en sus propias comunidades”.
En el encuentro participaron académicos correspondientes como Élmer Mendoza, el poeta náhuatl Natalio Hernández, la investigadora Sara Poot-Herrera, el poeta Óscar Oliva o el historiador José María Muriá.
PCL