El Teatro Isauro Martínez (TIM) ubicado en el centro de Torreón y considerado uno de los más hermosos de México, ha sido el escenario para el arte al igual que sus muros.
El TIM es producto del imaginario de un hombre que se forjó con el pensamiento del siglo XIX. De origen zacatecano y con su segunda década de vida encima, llegó a Torreón junto con su esposa, Juana Ibarra, quien estaba embarazada. Corría el año de 1898.
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De trabajar para una empresa alemana dedicada a la ferretería y los ultramarinos, el joven Isauro Martínez entendió que a través de la asociación podría impulsar sus propios negocios, enfocándose particularmente en el ramo del espectáculo.
Luego de visitar los escenarios más importantes, en la ciudad de St. Joseph, en Chicago, se enamoró del diseño y la arquitectura del Missouri Theatre, al cual Isauro Martínez hizo un homenaje replicando su fachada, obsequiando así el primer teatro a una ciudad joven que se desarrolló económicamente de forma vertiginosa.
Cuando Torreón tomó rango de ciudad se pensó que era la hora de tener un teatro digno y fue en 1928 que inició la construcción del TIM.
¿Qué significa el mural del Teatro Isauro Martínez?
En cuanto a la obra pictórica interior del TIM, inspirada en la pintura francesa del siglo XIX, concentra audacia y creatividad sensual debido a la diversidad discursiva que se manifiesta en una pintura simbolista que oscila entre pasajes de la mitología y de leyenda.
La decoración plástica de la sala de conciertos y de su plafón, obra de Salvador Tarazona, es lo que más llama la atención por su intrincada labor de arabescos, relieves de tipo indochino y lacerías otomanas que llegan al abigarramiento. Las impactantes pinturas murales a ambos lados del proscenio son el mayor foco de interés: contienen escenas de exotismo, exuberancia, imaginación, fantasía, delirio, decadencia y lujo que parecen sacadas de Las mil y una noches
El hermoso techo del Teatro Isauro Martínez es una obra de arte que roba los suspiros de los asistentes. Te contamos un poco más de su composición.
El plafón del centro se llama “La Inspiración”. Representa a un poeta en los momentos en que recibe los dones de las Musas.
A su alrededor destacan ocho composiciones que representan en su conjunto una vida: “La Revelación del Carácter”, “Heroísmo”, “El Juego”, “El Amor”, “La Visión”, “El Trabajo”, “La Bondad” y “La Vejez”.
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