Los despachos Vertebral, DOSA Studio, Faci Leboreiro y SUMA participan en la exposición Ciudad (in)Sostenible, realizada en el contexto del Festival de Arquitectura y Ciudad MEXTRÓPOLI, una muestra que analizó el trabajo de 19 despachos “que sabemos han ganado concursos, obtenido becas o que su trabajo haya sido publicado; se hizo una selección en el que se fue depurando”, explica en entrevista Alejandro Hernández, curador de la muestra, expuesta en La Laguna, en Doctor Erazo 172, colonia Doctores, en la Ciudad de México.
El recorrido profesional de estos jóvenes arquitectos puede ser considerado “no muy grande en escala, justo por su juventud”, como refiere el curador, pero parte de su labor arquitectónica incluye premios o participaciones como la Bienal de Venecia, el American Architecture Prize, el AZ Awards, Iconos del Diseño Architectural Digest o el Concurso del Pabellón
MEXTRÓPOLI
Pero, ¿quiénes son? ¿Cuáles son sus proyectos? ¿Qué hay con el impacto de las construcciones? ¿Qué pasa con la ciudad? M2 conversó con parte de los miembros de estos cuatro despachos que construyen la Ciudad de México.
Vertebral
Está conformado por Elías Kalach y Teddy Nanes, establecido en Ciudad de México, dedicado a la arquitectura y paisajismo desde 2016, despacho que apuesta por los espacios ajardinados, versátiles y ambiguos: una arquitectura de encuentros entre el interior y el exterior.
Entre sus trabajos relevantes se encuentra Casa Erasto y El terreno, un jardín comunitario y un centro educativo construidos solo con materiales reciclados y utilizados en edificaciones anteriores, por el que obtuvieron el AZ Awards 2021.
“La construcción es hasta cierto punto contaminante, lo que tenemos que hacer como sociedad y como gremio es rescatar materiales locales, rescatar pisos y duelas de otras obras. Nos interesa entender la ciudad como este espacio que se teje a través del espacio construido, y simultáneamente a través de jardines”, puntualiza Elías Kalach.
¿Ciudad de México es (in)sostenible?
“De alguna manera todas las ciudades están en un momento de crisis, en el sentido que han crecido de manera desmesurada: si vemos a Ciudad de México, por un lado las áreas verdes de las que presumimos están todas concentradas en el área poniente, mientras que en el oriente está sumamente limitada en cuanto a los espacios verdes, el acceso de luz y el agua. Por lo pronto, habitamos una ciudad que si sigue creciendo de esta manera, será insostenible. Sin embargo, hay gente trabajando hacia ciudades sostenibles y hacer espacios mejores”, dijo Kalach.
DOSA Studio
El despacho está conformado por Raúl Medina y Sergio Sousa, fundado en 2014. “Todos nuestros proyectos son diferentes porque responden a necesidades y sitios distintos. Básicamente se trata de tener una expresión por medio de la construcción, vinculando el arte y los procesos de la arquitectura misma, que reúna también un poco nuestra experiencia de nuestros viajes para poder materializarlas”, explica Raúl Medina.
“La Casa Palmas, que es una vivienda de puro ladrillo rojo, en Texcoco, Estado de México, es un parteaguas en el estudio; estuvimos en la Bienal de Venecia en 2018 con esta casa. Hay un antes y un después, sobre todo en el pensamiento, los procesos, la práctica y el entendimiento. Es el proyecto que focaliza de manera puntual nuestra práctica”.
Para Raúl Medina es importante el estudio del territorio y entender cuál es el sistema constructivo que puede beneficiar y tener un impacto nulo o mínimo en el ecosistema: “Cuando tenemos proyectos en la ciudad hay que pensar qué podemos aprovechar, no dejar atrás las estructuras que están de pie, sino más bien repensar de qué forma podemos adaptarnos y tomar lo que tenemos”.
¿Ciudad de México es (in)sostenible?
“Yo creo que si estamos de pie es porque todavía estamos sosteniendo algo; de alguna forma sí hay una cuestión ya insostenible, tenemos que marcar una pauta importante para tomar acciones: creo que estamos en un momento en el que podemos mejorar el rumbo de nuestra ciudad”.
Faci Leboreiro
Marina Leboreiro y Carlos Faci estudiaron juntos y desde hace 10 años decidieron empezar su despacho. En su trabajo hay diversos proyectos, resalta su labor en el interiorismo comercial como el restaurante Argentalia, en el Centro Histórico, Greengrass Condesa, o Noso, en Polanco, por el que fueron acreedores del American Architecture Prize y otros reconocimientos.
“Todos nuestros restaurantes nos gustan muchísimo. Hacerlos nos fascina, y creemos que el resultado, el concepto y la experiencia que hemos creado para cada uno es muy poderosa y tiene mucha personalidad”, dice Marina Leboreiro.
En cuanto a los retos de la arquitectura y el cambio climático, tanto Marina como Carlos Faci coinciden en que es importante que como sociedad “y nosotros desde una perspectiva de arquitectos, crear espacios que no sean fast fashion y después de dos o tres años un local comercial, un edificio o lo que sea, no se tengan que transformar por completo, sino que creemos espacios más duraderos adaptables a otras necesidades sin tener realmente la premisa de destruir todo”.
¿Ciudad de México es (in)sostenible?
(Ambos ríen). “Sí. Hay que pensar en espacios que sean universales o que se puedan reutilizar, usar materiales de talas controladas, sustentables y hacer conciencia a los clientes de qué cosas se pueden reutilizar. Los recursos no son suficientes: vivir en CdMx es como vivir en Jumanji, hay que sobrevivir todos los días”, dijo Faci.
SUMA
Diego García, Jalil Miguel y Diego Escalona son la oficina más joven. Su despacho tiene cerca de dos años y, sin embargo, este año ganaron el Concurso del Pabellón MEXTRÓPOLI, su proyecto: Pabellón Tezontle Ludens, que estuvo en la Alameda Central de Ciudad de México.
“Nuestra arquitectura está enfocada a entender el entorno, el lugar, los sitios, las personas que la habitarán. Nuestra trayectoria está relacionada con los medios naturales, con elementos como el agua, la piedra”, explica Diego Escalona.
Para los arquitectos es muy importante el reuso de edificios, ya que creen que pueden tener una segunda vida adecuándolos al uso actual, y entender dónde está parado y lo que se puede reutilizar, porque no siempre tirar y empezar desde cero es lo ideal. Lo mejor, aseguran, es pensar en la captación de agua pluvial, lo que ayuda a aminorar el impacto, así como repensar lo ya construido.
¿Ciudad de México es (in)sostenible?
“Creemos que se ha densificado de más y se ha salido de las manos la arquitectura y la ciudad: de cierto modo porque se ha comido esos pulmones que antes estaban, y se ha hecho un mar de edificios y quizá proyectos muy mal gestionados desde la corrupción, los que permiten edificios grandes y que provocan un impacto brutal en la zona. Hay que ser empáticos con lo que se está haciendo en la arquitectura y para la ciudad”, finaliza Jalil Miguel.
Las claves
*Vertebral
Es una representación del sueño americano a través de un collage y un código de barras, llevándolo a la idea de que el consumismo puede acarrear a la desestabilización.
*DOSA Studio
Muestra la ciudad en varias capas, en cuanto a las problemáticas que estamos viviendo después de la pandemia, la vivienda informal y el uso desmedido del vehículo.
*Faci Leboreiro
La representación gráfica es Pacman y lo que representa es cómo nos estamos comiendo el mundo y cómo consumimos la arquitectura.
*SUMA
Se eligió el muralismo mexicano para preguntarse de qué manera podían hablar de la ciudad, con sus múltiples capas, temas y contradicciones.
bgpa