El Centro Cultural Tijuana (Cecut) se ha convertido en la institución cultural más importante al noroeste del país, por sus propuestas y número de visitantes. En entrevista con MILENIO, Pedro Ochoa Palacio, su director en el sexenio 2012-2018, hace un balance de su gestión y habla de los retos y expectativas del centro en la nueva administración federal.
Dice que durante su dirección el Cecut recibió a 10 millones 973 mil personas, cifra que en gran medida se debió a las actividades desarrolladas en la galería Internacional El Cubo y en la Cineteca, que se inauguraron en el sexenio 2006-2012.
“Nosotros —afirma— no inauguramos nuevos espacios, tratamos de aprovechar y optimizar lo que ya se tenía”.
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Ochoa Palacio asumió la dirección del centro en febrero de 2013, con Rafael Tovar y de Teresa como presidente de Conaculta. Recuerda que lo encontró “funcionando, financieramente sano, sin deudas, pero además con espacios nuevos que había que atender”.
Entre estos espacios estaban El Cubo y la Cineteca. “Eran áreas —comenta— a las que necesitábamos generar es mayor flujo de público y un mayor contenido. Para eso, lo primero que hicimos fue programar en la Cineteca el ciclo de conferencias México a través de la cultura, con grandes personalidades que lograron atraer a una gran cantidad de visitantes. En las salas de exposiciones de El Cubo montamos exposiciones de gran nivel, entre ellas de Remedios Varo, David Alfaro Siqueiros, Olga Costa, Dr. Atl, Frida Kahlo y Fernando Botero”.
Las exposiciones de Frida y Botero, dice Ochoa, “las vieron alrededor 60 mil personas, cada una”. Por otra parte, “se hizo un catálogo bilingüe con todas las exposiciones, con información técnica completa”.
El Cecut es la única dependencia federal de cultura fuera de la Ciudad de México. ¿Qué retos significó dirigirla en el sexenio que acaba de terminar? El funcionario responde:
“Los retos fueron varios y tuvimos que responder con una programación muy balanceada que atendiera intereses locales, nacionales, internacionales. La comunidad tijuanense es muy demandante, y con mucha razón, por eso impulsamos la Feria del Libro de Tijuana y editamos publicaciones de artistas o situaciones regionales.
“Coeditamos catálogos de exposiciones nacionales, sin descuidar nuestra prioridad: publicar y difundir el trabajo artístico y la cultura local. Es decir, tienes que estar pendiente de qué es lo que pasando en la comunidad cultural y apoyar los proyectos que surgen aquí”.
Al preguntarle sobre los desafíos del centro en el actual sexenio, afirma:
“El de una programación cultural atractiva, con mucho contenido, así como cuidar la administración del Cecut. Debe hacerse un uso racional, apropiado, del presupuesto en todo: el mantenimiento de las instalaciones, los salarios y, desde luego, en los contenidos, que son fundamentales para que el CECUT mantenga su impulso a la cultura mexicana y la difusión de propuestas de otros países”.
ASS