Aprendió a ver y a plasmar sus ideas desde temprana edad. Ahora conserva la mirada puesta en un aprendizaje permanente y sin discriminación, pues asegura que observa la obra de los artistas de renombre, pero también la de los jóvenes que intentan innovar en el terreno de la plástica contemporánea.
Así se describe Jesús Omar Campos, pintor coahuilense invitado por Avelina Lésper a formar parte de la colección El Milenio Visto por el Arte, quien este año entregó su propuesta para la colección considerando como elemento 'El Tiempo'. El trabajo de este artista será reseñado en Milenio Televisión tentativamente el 19 de noviembre, siendo parte de un proyecto donde participan 30 artistas con igual número de obras.
En entrevista para Milenio Laguna, este joven pintor originario de Villa Unión, Coahuila, indicó que trabajar para esta empresa ha sido una gran experiencia que le abrió la puerta a nuevos horizontes. Es el primer coahuilense que se suma a este proyecto de gran alcance.
“Fui considerado desde el año pasado, a finales de noviembre, y en enero se hizo el registro de mi participación oficial por medio de la firma del contrato para participar en el proyecto. Se me da un tema que es El Tiempo dentro esta nueva edición del proyecto de Milenio y empiezo a trabajar a partir del mes de febrero; ya en mayo tenía que tener lista la pintura y en el mes de junio se hizo la entrevista en Saltillo.
“Fue una experiencia muy padre porque nunca había participado en un proyecto nacional e internacional como los que hace Milenio. Ya presenté mi trabajo y la maestra Avelina dijo haber quedado muy satisfecha con mi pintura”, comentó.
Nacido en el año de 1986, su vocación, afirmó, la descubrió desde pequeño. No obstante comenzó a buscar soluciones profesionales a los 18 años cuando tuvo su primer maestro de pintura, y diversificó sus procesos creativos.
“Nunca había tomado cursos ni nada. Todo había sido una búsqueda, yo solo y como yo entendía. Tuve mi primer maestro en Allende, Coahuila, y comencé a aprender de técnicas. Agarrarlo ya más en serio fue a los 25 años cuando decido entrar a la Escuela de Artes Plásticas en la Universidad Autónoma de Coahuila y ahí aprendo sobre teoría y más técnicas porque desconocía lo que es el grabado, la escultura, talla en madera y todo eso, y aprendo más sobre mi profesión”.
Jesús egresó de la carrera en el año 2016 cuando la Escuela de Artes Plásticas cambió de Saltillo al Campus Arteaga de la UAdeC. Al hacerlo se dio cuenta de que podría vivir con plenitud su oficio, ya que a cada pintura que realiza casi de inmediato encuentra un interesado en ella, lo que le ha permitido vivir de su trabajo, pero al mismo tiempo no contar con una colección.
“El tema que manejo yo es la figura humana, mi pintura es un poco surrealista y se enfoca más en el retrato y en diferentes elementos que ahora incorporo como las aves, los peces, pero muchas veces se trata de animales muertos, esto permite hacer un contraste con la belleza de la figura humana o de los rostros que hago para que no sea sólo una pintura que se vea bonita sino que tenga un mensaje y la gente lo interprete a su manera”.
El pintor mantiene claro lo que desea manejar como discurso propio. Sabe también que cada espectador debe intentar interpretarlo buscando su propia narrativa, la poesía como elemento personal e intransferible en cada mirada.
Con este punto de partida se aleja del arte concepto que para poder ser entendido, en muchas ocasiones debe generar una ficha técnica que justifique un quehacer, cuestionado ante la falta del manejo de técnicas.
"Sobre el arte conceptual puedo ser sincero, no me llama mucho la atención pero respeto lo que hacen otros compañeros porque en la escuela también llevábamos esa clase, nos enseñan a ver artistas sobre el arte conceptual, pero es cuestión de gustos".
Inspirado en los temas mitológicos y las texturas que plasmó Rubens, con una pincelada que ha sido estudiada por la sensualidad que derrocha, Jesús Omar asegura que también Arturo Rivera con su oscuridad le ha provocado su análisis.
En medio de un mundo pictórico además admira a jóvenes pintores como José Parra, artista nacido en Guadalajara que como él transita entre las corrientes clásicas y contemporáneas, entre lo surrealista y barroco, en la ensoñación.
Con la propuesta que entregó a Milenio sobre El Tiempo, el artista coahuilense admitió que debió salir de una zona de confort porque de hacer formato pequeño, debió pensar una obra de gran formato que plasmó en un cuadro de más de un metro. Dijo que su mismo estudio, se presta al formato pequeño, pero al asumir el tema la frontera del espacio se desdibujó.
Exposición en puertaPara noviembre presentará trabajo en La Casa de las Artes en Piedras Negras Coahuila junto con un artista de Apodaca, Nuevo León. En esta muestra presentará obra en gran formato.Asimismo se prepara para una exposición colectiva que se presentará en Saltillo.