El periodo de confinamiento ha dejado como reflexión al Pueblo Mágico de Bustamante la necesidad de un turismo más responsable, ante la posibilidad de reabrir sus parajes naturales pronto.
La ausencia de visitantes ha calado en los ingresos de las familias, sin embargo, también ha permitido el saneamiento del agua que transita por sus más de 32 kilómetros de acequias, así como la limpieza de sus áreas verdes.
- Te recomendamos Cirqueros piden ser incluidos en reactivación de entretenimiento Comunidad
Carlos Gómez Flores, presidente del Comité de Pueblo Mágico, recordó que el municipio fue el último de la red Pueblos Mágicos en registrar casos covid-19. Al 25 de agosto, Bustamante sólo registra ocho casos.
"El cañón de Bustamante y sus parajes naturales están en un renacimiento, porque el umbral de resiliencia ya se había rebasado con los miles de visitantes. Lamentablemente, muchos de los turistas no tienen respeto por los ecosistemas", apuntó Carlos Gómez Flores.
A través de redes sociales, se anunció la reapertura al público de cabañas y hoteles de Bustamante para el fin de semana del 28 al 31 de agosto.
Para el Comité del Pueblo Mágico es necesario contar con un ecoturismo que respete las condiciones medioambientales del municipio. Por ello, se buscará generar más consciencia entre los visitantes.
"Hoy en día la gente se está preparando para recibir un turismo más ecológico, que vivan el avistamiento de aves, con paseos interpretativos de fauna y flora. Ahora está descansando la tierra y sabemos que la situación va cambiar", mencionó Gómez Flores.
Bustamante fue designado Pueblo Mágico en 2018, contando con una red de acequias de 32 kilómetros que son utilizadas por los habitantes, una de la más extensa de Nuevo León.
También es reconocido por su gastronomía, sus artesanías, además de contar con dos museos en su casco histórico