Daniel Catán, considerado el compositor más significativo del siglo XXI de este país, “fue el primer mexicano al que una casa de ópera estadunidense le comisionó una obra en español, y a partir de ese momento se le abrió la puerta a la ópera mexicana en nuestra lengua en Estados Unidos y otros países europeos”, asegura de la crítica e investigadora de ópera Enid Negrete.
A diez años del fallecimiento de Daniel Catán (México, 3 de abril de 1949- Texas, Estados Unidos, 9 de abril de 2011), cuya creatividad lo llevó por el arte lírico, por la música de cámara y de orquesta, familiares, amigos, cantantes e investigadores le rinden un sentido homenaje.
El doctor Alberto Pérez-Amador Alan, especialista en cultura virreinal, ópera mexicana y libretos, lamenta que la mayoría de las ciudades en México no hayan visto una sola de sus óperas, siendo uno de los artistas mexicanos más importantes del paso del milenio y el que puso más alto el nombre de México en el mundo.
“Resulta imperativo que se estrene la última ópera Meet John Doe, basada en el filme de Frank Capra, que Daniel Catán dejó inconclusa, pero muy avanzada. Ha sido terminada con base en sus apuntes y esbozos por un equipo de compositores especializados en el estilo de Catán”, exige.
Pérez-Amador Alan destaca que la producción operística de Daniel Catán, si bien breve, lo ha llevado a ser considerado “el compositor operístico más exitoso de Iberoamérica. De tal suerte, por una parte, dejó una obra que ya ahora no solo es parte central del patrimonio cultural mexicano, sino de todo el mundo hispanoamericano, y, por otra parte, logró que el idioma español se vea de modo normal en los escenarios operísticos internacionales”.
Compositor innovador
Daniel estudió filosofía en la Universidad de Sussex, en Inglaterra, antes de matricularse en Princeton como estudiante de doctorado en composición bajo la tutela de Milton Babbitt, James Randall y Benjamin Boretz, y dada la calidad de su obra, su música es publicada por Associated Music Publishers.
Enid Negrete, quien también es doctora en artes escénicas por la Universidad de Barcelona y coorganizadora del homenaje que se rendirá a Daniel Catán, sostiene que se le debe recordar como un compositor innovador y como uno de los personajes más influyentes del cambio del siglo XX al XXI.
En el primero de los dos reconocimientos, registrado este domingo, investigadores y cantantes de ópera hablaron del legado musical del compositor. Se le evocó en el "Tributo a Daniel Catán, en la voz de sus intérpretes", el cual consistió en una charla virtual que se transmitió en la página de Facebook de la soprano mexicana María Katzarava https://www.facebook.com/Katzarava/.
Andrea Puente, viuda del reconocido compositor y músico, también estará presente en el segundo homenaje que se contempla dentro del módulo III del Diplomado de Ópera Mexicana (Opera Mexicana Esmufaa), organizado por Enid Negrete, en colaboración con la Escuela Superior de Música Fausto de Andrés y Aguirre, que se llevará a cabo en línea del 26 de abril al 7 de mayo, y en el que se hablará sobre el proceso de trabajo de Daniel Catán.
Enid Negrete indica que Daniel Catán “se fue dejándonos seis obras de enorme importancia para la ópera mexicana e iberoamericana. Hizo la primera obra del realismo mágico, la única basada en un texto de Octavio Paz y, otra que integra ritmos poco usuales en la ópera, sin mencionar la primera basada en una película. Su labor, como punta de lanza del idioma español en la ópera estadounidense, así como en la variedad de sus temas, es lo que nos hace considerar su legado como extraordinario”.
Asimismo, el doctor Alberto Pérez-Amador Alan, precisa que Daniel Catán no fue el primer compositor que escribió óperas en español.
“Muy al contrario: nuestra tricentenaria historia de la ópera mexicana e iberoamericana con libretos en español se remonta hasta el siglo XVII con libretos de Lope de Vega, Calderón de la Barca, o en el siglo XIX con textos de Gustavo Adolfo Béquer o en el siglo XX con algunos de Xavier Villaurrutia, Alejandro Casona, Emilio Carballido, Carlos Fuentes, Manuel Mújica Láinez o Ricardo Piglia. A pesar de nombres tan ilustres de las letras que escribieron libretos de ópera, no fue hasta las de Daniel Catán que el español se posicionó en países no hispánicos como lengua operística”.
Insiste en que urge que sus óperas sean representadas con regularidad en todo México. Y en particular la reposición y grabación de la primera: Encuentro en el ocaso, con los mejores cantantes.
“Daniel Catán pensó al final de su vida que era una obra de juventud y no la consideraba de modo serio; la importancia de Catán en la historia de la ópera mexicana, iberoamericana e internacional actual es tan grande que no podemos darnos el lujo de renunciar a esa ópera”.
El legado de Daniel Catán
Las creaciones operísticas de Daniel Catán por las que se le recuerda son: Salsipuedes, que fue encargada por la Houston Grand Opera en 2004. La hija de Rappaccini, escrita en 1991 basada en un cuento de Nathaniel Hawthorne, aunque en palabras del compositor fue “un pequeño homenaje a Octavio Paz”.
La obra Encuentro en el ocaso, de 1980, cuyo libreto escribió Carlos Montemayor; Florencia en el Amazonas, de 1996, está inspirada en la obra literaria del colombiano Gabriel García Márquez.
Además de Il Postino, cuyo libreto fue escrito por el propio Catán, inspirado en la novela del chileno Antonio Skármeta, y cuya partitura compuso para la voz baritonal de Plácido Domingo, comisionada por la Ópera de Los Ángeles, en 2010.
Dicha obra se montó en 2011 en el Festival Internacional Cervantino, en el Teatro Juárez, luego de presentarse en Ciudad de México, en Viena, Austria y en Los Ángeles, California. Con una gala cervantina, se rindió un homenaje a su creador, el compositor Daniel Catán, personaje fundamental en el campo de la ópera mexicana, fallecido en abril de ese año.
Y por último, la ópera Meet John Doe, basada en el filme de Frank Capra, que dejó muy avanzada, pero sin concluir.
bgpa