La etapa más importante para el desarrollo en la vida de las personas es la niñez, pues es cuando se adquieren habilidades y conocimientos que se quedarán almacenados en el cerebro para toda la vida, por lo que expertos en formación infantil han explicado la importancia de estimular a los pequeños con actividad física, idiomas, lectura, ser autosuficientes, entre otras.
Si bien los intereses de cada niño son particulares de acuerdo a su entorno, hay algunos patrones que se repiten, como el gusto por la naturaleza, el espacio e incluso los dinosaurios; estos últimos se ha convertido en el tema de más curiosidad entre los menores que terminan por volverse investigadores de estos animales prehistóricos.
Este gusto popular va más allá de una moda, pues desde hace varias generaciones atrás se detectó que el gusto intenso por los dinosaurios marcaban la tendencia en cuanto a juguetes, libros y otros artículos infantiles como mochilas, ropa, entre otros.
¿Por qué los niños se apasionan con los dinosaurios?
Al parecer el tema de estos animales sirve como una apoyo para los pequeños que están en desarrollo cognitivo, especialmente en etapa preescolar, quienes están separando la realidad de la fantasía, de acuerdo a un artículo publicado por la UNAM en apoyo del psicólogo Fernando Mata Rosas, profesor de la Facultad de Psicología de dicha institución.
En el texto se explica que el interés de los pequeños por estas criaturas se debe a que utilizan a estos animales como una forma de estimular su imaginación, además de que les representan figuras con cualidades increíbles.
“Los pequeños asocian a los dinosaurios con fuerza, poder, control y ferocidad, una idea que combinan con la fantasía, magia y todo lo imposible”, se lee en la publicación de UNAM Global.
Estos gustos son llamados en psicología 'intereses especiales', ya que el niño o la niña se apasiona por un tema en específico, lo que los lleva a querer saber todo sobre ello, generándoles una satisfacción al poder hablar sobre algo en lo que se consideran conocedores.
De acuerdo al artículo, los padres son responsables de alimentar el desarrollo de sus hijos a través del fomento para que continúen investigando, respetando sus gustos y acercándolos más al aprendizaje, de manera que su hijo o hija se entusiasme con los nuevo conocimientos que adquiere.
“En todos los casos los padres apoyan esa capacidad para ejercitar la comprensión y memorización de su hijo, además de los intereses que definen sus gustos, la oportunidad de elegir e identificarse con algo. Así sea ir muchas veces al museo para ver a los dinosaurios. Esto les genera un orgullo y satisfacción de saberse los padres de un niño conocedor de un tema: ‘¡Tan chiquito y sabe más que yo!’"
ARP