El amor entre los seres humanos, la amistad y la hermandad son algunos de los temas que aborda El chat, la comedia de Tomás Urtusástegui en la que también se explora y “trata el cómo resolver problemas siendo un adulto mayor, el dejar entreabierta la puerta del amor porque puede volver a aparecer y hay que tomarlo, pero todo desde la perspectiva de esta era tecnológica”.
En entrevista, su director Enrique Vega, comentó a MILENIO que esta puesta en escena discurre entre el encuentro de Enrique, interpretado por Gerardo Martínez Saldívar Pichi, y Belisario, que le da vida Dale Carley. Estos amigos se ven envueltos por la interacción y el descubrimiento que puede existir entre las personas en el mundo de Internet.
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“Es la historia de unos amigos, de un amigo que ayuda al otro que está en un estado de depresión profunda porque perdió a su esposa, tiene una pensión raquítica, y lo que trata de hacer Belisario es ayudar a su amigo Enrique para salir de esa depresión, invitándolo a su casa, pero básicamente a lo que lo invita es a entrar a la tecnología. Yo veo que, sobre todo los adultos mayores, están negados a esa parte: les cuesta trabajo incluso utilizar un teléfono inteligente”.
Para Enrique Vega, quien expresa entre risas estar en esa etapa también, la pieza escénica cuestiona y plantea: ¿qué sigue después de la jubilación?
“A las personas adultas la familia la relega, los dejan que cuiden a los nietos, que cocinen, que hagan el aseo, y la verdad que una persona que se jubila tiene las puertas abiertas para una nueva vida, pero muchas veces no nos damos cuenta de eso; con esta obra nos planteamos que debe de perdurar la amistad, el amor a sus semejantes y tener una posibilidad de buscar una nueva forma de vida, cuando la gente ya está jubilada”.
Para el director de El Chat, Enrique Vega, “definitivamente hay que trabajar mucho más porque los adultos mayores son personas que han rendido toda su vida, han trabajado toda su vida. Este texto me deja una experiencia de reflexión y, sobre todo, de ayuda al adulto mayor, aunque hacen falta más programas pensados en ese rubro”.
Dos visiones
Hablar de tecnología es cuestionar su lado positivo y negativo, situación que de alguna manera está presente en El chat, sobre todo la parte favorable, porque, para el equipo, adentrarse es abrir una puerta al mundo.
En cuanto a la obra, cuando “uno entra a las redes se encuentra con infinidad de cosas; en este caso, conocen por el chat a unas hermanas de Guadalajara, y dice Belisario: ‘Son unas muchachitas, apenas van a cumplir 48 años’. Es muy tierno, y desde ese punto de vista, hay que darnos la oportunidad de ser felices. La obra también trata el cómo resolver problemas siendo un adulto mayor y, sobre todo, teniendo el apoyo de alguien porque luego nuestros amigos son un lazo más fuerte, incluso más que el de un familiar”.
En cuanto al autor del texto y en relación con la temática, explicó Enrique Vega que Tomás Urtusástegui toda su vida fue médico cirujano, y que empezó a escribir durante su profesión y hasta jubilarse: “Ahí tenemos una prueba fehaciente de que podemos lograr muchas cosas; después de su jubilación escribió 502 obras de teatro, y tengo entendido que hay obra inédita y que algún día saldrá a la luz. Así que nunca es tarde para lograr algo”.
La música es interpretada por el saxofonista Carlos Bretón, además de Dale Carley en la trompeta. El Chat se presenta los sábados de julio en el Aula Magna del Instituto Cultural Helénico, a las 19:00 horas.
PCL