Este domingo un chatarrero inventor irrumpió en el calvario de Metepec...
Llegó con su casa móvil, en una bicicleta de 2 metros de altura y compartió su historia de amor con Lucía, quien murió después de un incidente.
Este gran relato contado por medio del acto circense “Llévame”, de la Compañía Claunódromo, fue representado por el actor Manuel Ariga, quien dice que por medio de la comedia intentan abordar temas sensibles relacionados con la violencia.
“El personaje ha perdido a su esposa y se ha vuelto introvertido; se queda en su propio mundo, a partir de ahí se convierte en recolector de chatarra y empieza a hacer sus inventos y maquinarias que le ayudan a reconstruir la memoria de su amada”.
Comenta que para conformar a este protagonista retomó rasgos estéticos del steampunk y de submundos como los planteados en Micmacs o Amélie, mismo que nace del deseo que tienen las personas de dar amor, “y que de pronto se vuelve difícil encontrar a alguien para ofrecerlo y aquí Lucia representa un poco esa búsqueda constante”.
Por otro lado, menciona que es importante retomar este tipo de temas para dejar de normalizarlos, y aunque el espectáculo está pensado para todo público, se abordan tópicos como el asesinato, el duelo y la soledad, con la finalidad de crear conciencia en todos los miembros de la familia.
“Nuestra generación ya tiene un legado de violencia y si los más chicos lo siguen heredando pueden repetirlo ya sea como víctimas o victimarios, entonces para mi es importante que a través de la comedia, que es una forma muy noble y bella de llegar a la gente, podamos dialogar de cuestiones tan sensibles como éstas”.
Para concluir puntualiza que tuvo un gran recibimiento de los mexiquenses, “que a pesar del calor o el sol se mantuvo atento y participativo (el público), es algo que agradezco mucho”.
LC