Cuando comenzó el confinamiento debido a la emergencia sanitaria, el escritor español Javier Sierra se sintió aliviado, pues al final a un creador le viene bien el encierro, pero al asomarse al balcón y darse cuenta de que sus vecinos pasan por lo mismo, entonces se da cuenta “de la enorme gravedad de la situación y de que no entiendo muchas cosas”.
“Sobre todo: ¿por qué los políticos o los responsables de nuestra sociedad tardan tanto en reaccionar y en tomar decisiones? No entiendo por qué no aparecen en los medios de comunicación más científicos explicándonos lo que pasa”.
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Y como un medio para reflexionar sobre el presente, con una perspectiva literaria, en la que recupera mitos antiguos y formas de comunicación como la epistolar, es que el narrador escribió El mensaje de Pandora (Planeta, 2020), en donde también se propuso transmitir un mensaje positivo al lector.
“El escritor tiene la tentación de ordenar el mundo a través de lo que escribe: este libro dialoga mucho con lo que ha sido mi trayectoria literaria, pero a la vez le da un giro en una situación de gravedad: en vez de mirar al pasado, he querido mirar al futuro, teniendo en cuenta todo ese bagaje que arrastramos como especie; en realidad es una reflexión sobre el futuro y acerca de lo que queremos hacer en adelante”, cuenta en entrevista con MILENIO el narrador español.
Convencido de que todo creador debe responder a los desafíos de su tiempo y, en especial, contribuir a interpretarlo, el autor de novelas como La cena secreta o El maestro del Prado se propuso escribir una historia en la que aborda el tema de la pandemia en forma de fábula, como una manera de alejarse, al menos literariamente, del hecho central de El mensaje de Pandora.
“Observo que la sociedad se está enfrentado a esto con cierta inmadurez. Nos hemos acostumbrado a que todo funcione de manera automática y pensamos que la solución de los problemas también tiene que ser así, y no es verdad: las cosas vinculadas con la vida requieren tiempo. Un árbol no crece de manera espontánea, le lleva años desarrollarse.
“Un ser humano tampoco se educa de la noche a la mañana y cuando nos enfrentamos a un problema como este es un poco infantil creer que la solución va a ser rápida, que la vacuna va a llegar de manera inmediata, o que tal o cual gobernante ha encontrado la clave para salvarnos del mal de una manera espontánea. Nos hace falta un poco de madurez para enfrentarnos a los grandes desafíos”, destacó Javier Sierra.
En ese sentido, el escritor español llamó a buscar respuestas en quienes saben: los expertos en virología, a los que no se les ha hecho caso, porque se le ha puesto más atención al que tiene la batuta política, que al virólogo que sabe cómo funciona una pandemia, “lo cual nos está llevando a situaciones dramáticas en muchos lugares”.
“El conspiracionismo es hijo del miedo. Esto ya pasaba en otras épocas históricas; cuando la peste negra estuvo en Europa, culpaban a los judíos de que ellos se dedicaban a contaminar las aguas con sus mercancías. Eso formaba parte de la teoría de la conspiración y esto sólo se remedia educando a nuestra sociedad, pero una sociedad educada es una sociedad crítica y muchas veces no se busca eso”.
Javier Sierra advirtió sobre la necesidad de que los medios de comunicación reflexionen seriamente sobre el papel que deberán cumplir los próximos años, a fin de quitarle espacio a los políticos, en beneficio de la información científica, histórica, o de la crónica, aspectos que han perdido lugar para dar pie a la propaganda ideológica.
“Al final nos estamos dando cuenta que da igual que uno sea un gobierno de izquierdas o de derechas, que uno pertenezca a un partido o a otro, la gestión está siendo desastrosa en todas partes del mundo”.
PCL