Artaud

Teatro

La osadía puede costar cara porque pueden perderlo y que éste se cierre y decida no ser partícipe de la representación.

Las reflexiones filosóficas y estéticas de Antonin Artaud siempre serán desafiantes. (Especial)
Jaime Chabaud Magnus
Ciudad de México /

La Máquina de Teatro, entre otros muchos emprendimientos como su valiosísimo trabajo comunitario en el estado de Guanajuato y ahora en Ciudad Juárez, en el campo de la escena profesional lleva rato armando una trilogía que ha titulado “Serie de Encarnaciones Filosóficas” revisitando —o mejor dicho: haciendo que nos visiten— personajes esenciales del pensamiento y el arte como Antonin Artaud, Franz Kafka y Fernando Pessoa. Este cronista tuvo en suerte presenciar al primero de ellos cuando, justamente, acababa de releer una nueva traducción de Enrique Atonal que está próxima a publicarse en México con El teatro y su doble y los artículos que escribiera sobre el teatro en el diario El Nacional. La dupla extraordinaria que siempre han hecho Clarissa Malheiros y Juliana Faesler cristaliza en esta trilogía sus obsesiones creativas.

Cuando uno lee a Artaud se topa con “un vértigo y una caída infinita”, dicen en el programa de mano. Agregaría también que lo conduce a uno a un delirio conceptual que sin embargo tiene su método. Cada frase de Artaud es hacha, cuchillo, bala, al tiempo que herida, funda y cadáver. Las reflexiones filosóficas y estéticas de Antonin Artaud siempre serán desafiantes. Llevar sus ideas al teatro —que no sus obras teatrales— resulta un desafío que puede ser un plomo para el espectador. La osadía puede costar cara porque pueden perderlo y que éste se cierre y decida no ser partícipe de la representación.

Sin embargo, estas mujeres de teatro estupendas, Faesler y Malheiros, conjuran los riesgos de perder al receptor con una dramaturgia lograda (que por momentos corre el riesgo de lo retórico o el abusos del tiempo pasado) y una puesta en escena y actuación que compensan cualquier posible fuga de atención. Clarissa es un monstruo de la actuación que encarna un Antonin Artaud cínico, críptico y locuaz, que repasa su vida (incluyendo su viaje a México) y entregando su pensamiento, su defensa por el consumo de estupefacientes, su pasión por el teatro, en este estupendo delirio escénico.

TRASPUNTE

CONSTRUCCIÓN TEATRAL

Artaud está construida (dramaturgia de Malheiros) a partir de textos de Antonin Artaud, Florence de Mèredieu, Gonçalo de Tavares y Wittgenstein. En escena participan también Sol Sánchez, José Gómez Covián y Fidel Nah. La trilogía se presentó en el Teatro Santa Catarina de Teatro UNAM.