Gracias a músicos como Lelio Giannetto, el contrabajo ocupa un lugar protagónico en el mundo de la improvisación. El contrabajista nacido en Palermo, a quien tuvimos la oportunidad de escuchar en México como parte del proyecto Bassemasse, impulsado por él, David Sánchez y Sebastian Gramss, falleció la semana pasada a los 59 años. Una pérdida enorme para la música creativa.
- Te recomendamos Lola a los 50 Escenario
Contrabajista de desbordante imaginación, su gran sentido del humor le daba un toque especial a sus conciertos. El músico, que en amena charla afirmó que vivía en “un aprendizaje sin fin”, inició su idilio con su instrumento cuando era muy joven y escuchó a Malachi Favors con el Art Ensamble of Chicago. “Para mí fue muy extraño porque nunca había visto un contrabajo y la música era muy profunda, plena de sensibilidad. Para mí fue una conmoción”.
Su sensibilidad se alimentó de la música de Thelonious Monk, Charles Mingus, John Coltrane y Albert Ayler. “Esa es mi línea”, me dijo con una sonrisa.
Lelio aseguraba que su acercamiento al sonido tenía una función social. “No es solo una cuestión de estética, puede serlo también, sobre todo en Europa con la tradición cultural y filosófica, la que no niego, pero además puede haber algo más. No es algo que se oponga, sino es algo complementario”.
En la entrevista realizada hace tres años, advertía: “Tenemos conciencia de que algo está cambiando. Estoy aquí, así que ¿qué voy a hacer? Toco en orquestas y grupos, pero lo que hago en mi proyecto personal es no únicamente desarrollar la música tradicional, sino también algo que está en el mundo. No me refiero a la llamada música del mundo, en el sentido comercial, sino en algo más profundo, que está en el fondo del espíritu humano. El sonido genera humanidad”.
- Te recomendamos La fiesta del órgano Escenario
¿Qué es el contrabajo para Lelio Giannetto? Con una sonrisa respondió: “Es un instrumento muy extremo, pero también es como un juguete. Es un instrumento muy generoso del que puedes obtener muchos sonidos. Puede ser como un bufón, que, al mismo tiempo que ríe, puede decirle al rey: ¡estás desnudo!”
Performancero natural, el contrabajista recordaba lo que su madre le decía cuando era pequeño: “¡Tú eres un actor, eres un actor!”, para luego agregar: “Para mí es importante mostrarme como soy, con mis cosas buenas y malas, con mis limitaciones y mis bondades”.
CODA
“EL SONIDO DIO ORIGEN AL MUNDO”
Para Lelio Giannetto, “desde el punto de vista de la antropología, para muchas culturas el sonido dio origen al mundo. Dios es el sonido o el sonido es Dios, quien creó todo. Algunas veces olvidamos que el sonido es el origen de todo, incluso del ser humano. En la Biblia y en otras religiones encuentras esta idea”.