Sorprendió la cancelación de la Royal Winnipeg Ballet, bajo la dirección de André Lewis, programada para este martes en el Auditorio Nacional.
Después de haberse montado en el Auditorio del Estado, en Guanajuato como parte del programa de Canadá, como país invitado de honor del 47 Festival Internacional Cervantino, se esperaba su presencia en la Ciudad de México.
En la página web del Auditorio Nacional, que dirige Eduardo Amerena, ya no aparece nada de la presentación del ballet de Canadá. En cambio en el sitio de Ticketmaster se anuncia, sin dar más detalles sobre la razón por la cual ya no se presentará esta agrupación, programada para este martes 15 de octubre a las 18:00 horas: “Este evento ha sido cancelado”.
Incluso en Casa Canadá instalada en la ciudad de Guanajuato, desconocen cuáles fueron las circunstancias de esa decisión.
El Auditorio Nacional confirma que la venta de apenas 60 boletos, los llevó a tomar la decisión de no realizar esta función.
Desde el pasado 17 de septiembre se le avisó de esa determinación a la directora del Festival Internacional Cervantino, Mariana Aymerich.
La explicación que le ofrecieron es que no veían viable esta presentación, ya que desde que habían iniciado la promoción, el 19 de julio con esfuerzos considerables en difusión tanto en radio como en televisión, prensa y redes sociales, al 17 de septiembre se habían vendido muy pocos boletos.
Por lo que argumentaron que de realizarse este montaje, representaría un riesgo para el prestigio de la Royal Winnipeg Ballet, como para el FIC y para el Auditorio Nacional.
Ante la ausencia en la Sala de Prensa de la persona encargada de difusión del Cervantino, MILENIO consultó a Antonio Martínez, vocero de la Secretaría de Cultura, confirmó que esa fue una decisión del Auditorio Nacional.
“Ellos tiene un convenio con una radiodifusora, y al final decidieron que no le entraban, nosotros incluso les ofrecimos más apoyo en la difusión con más spots. Al final, nosotros respetamos esa determinación”.
El funcionario indicó que no entiende qué pasó, porque los otros espectáculos programados en la Ciudad de México se vendieron muy bien.
“Por ejemplo Regina Orozco y Omara Portuondo; así como Sara Varas. Todo lo que va a Bellas Artes está muy bien vendido”.
Negó que la presentación haya sido cancelada por censura, al ser un espectáculo que expone el maltrato y abuso que sufrieron los niños y niñas por parte de la iglesia, cuando fueron arrancados de sus familias para ser llevados a las escuelas residenciales, con la supuesta intención de asimilarlos a la cultura occidental.
“No, no, fue censura, es un tema de negocios. El Auditorio directamente vio que por el tiempo que tenía de promoción y las bajas ventas, no le alcanzaría el tiempo para vender todas las localidades”.
epc