En Estados Unidos son pocas las galerías que dan espacio al arte de la comunidad chicana, pero es posible apreciar una muestra de su trabajo en la exposición Construyendo puentes en época de muros, que se presenta en el Centro de las Artes.
La exhibición presenta a 29 artistas nacidos en el sur de California y con ascendencia mexicana, todos de diversas generaciones, quienes muestran sus propuestas a través de la instalación, la pintura, el video y performance.
Roberto Gil Montes llegó a Los Ángeles, procedente de Guadalajara, a los 13 años. Cuando recorría la ciudad junto a su hermano, veía los murales urbanos, los cuales no le convencían.
“Yo ya pintaba y le decía a mi hermano: ‘estos murales no tienen nada que ver comparados con el trabajo de (José Clemente) Orozco, de nuestra ciudad’. Tenía todo esto que terminé por cuestionarme mi identidad”, reconoce el artista plástico.
Algunas de las temáticas presentes en la exposición son cuestionamientos a la identidad, elementos sobre asentamientos populares, elementos kitch como los autos y luces neón, así como la migración, entre otros.
Otros de los artistas participantes en la exposición son Roberto de la Rocha, Frank Romero, Donna Deitch, Judith F. Baca, Eloy Torrez, Viviana Paredes, Camille Rose García, por mencionar algunos.
Para el artista plástico Roberto Gil Montes, el arte chicano está encontrando sus nuevos lenguajes en el performance, la instalación y el cine. Sin embargo, los artistas que se asumen como tal siguen siendo marginados de las galerías y museos en Estados Unidos
“Creo que estamos en la misma situación: el arte negro, el arte coreano, los artistas puertoriqueños, en Nueva York es muy fuerte; seguimos empujando por una mayor participación, pero somos marginados aún”, opina Gil Montes
En la presentación de la muestra estuvieron Liliana Melo de Sada, presidenta del Patronato del Paseo de la Mujer Mexicana; Marco Granados y Melissa Segura, ambos por Conarte, y el artista.
A detalle
La colección es promovida por Cástulo de la Rocha y contó con la curaduría de Julián Bermúdez, la cual ha sido presentada en espacios como el Museo de Arte Carrillo Gil y el Centro Cultural Clavijero, para después visitar Acapulco y Oaxaca.