Este año se cumplió el centenario de Juan José Arreola (1918-2001), segundo ganador del Premio FIL (cuando aún se llamaba Premio Juan Rulfo) y de muchos otros reconocimientos; promotor cultural, maestro de escritura y literatura, editor; celebridad de la televisión mexicana, tan conocido en las últimas décadas de su vida como un actor o un futbolista; autor de un número reducido pero brillantísimo de libros que lo hicieron uno de los más grandes escritores del siglo XX mexicano.
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Aquí en Guadalajara y en el resto del país, el año ha sido de homenajes y recuerdos de Arreola y de su obra. Muchas personas que admiramos su trabajo buscamos aprovechar la ocasión para agregar a los comentarios que inevitablemente aparecerían: a la simple mención de Arreola como parte de las efemérides. El resultado ha sido una variedad enorme de aproximaciones a su trabajo en muchos medios. Éstas incluyen análisis de todas las resonancias de su obra; de todos los aspectos y aportaciones de su prosa; de todos sus textos, desde los más conocidos —como los cuentos de Confabulario y Varia invención o su novela La feria— hasta los más raros; elogios y críticas (en especial, desde el feminismo: es verdad, ni modo, que el tratamiento de las mujeres en la obra de Arreola es de otra época).
El conjunto, además de demostrar que Arreola sigue hablándonos, dándonos motivos para leer y conversar, parece haber terminado, definitivamente, con el silencio que parecía haber caído sobre su figura en los años posteriores a su muerte. Arreola ha revivido entre nosotros, y esto es para bien.
En el Salón 6 de la planta baja de la FIL, Sara Poot Herrera y Orso Arreola —hijo de Juan José— tendrán una charla, titulada “Arreola a tres voces”, que será el homenaje más importante al escritor dentro de esta edición de la Feria. El evento será especial no solo por la labor de preservación y difusión de la obra de su padre que Orso ha llevado a cabo durante muchos años, sino también porque la doctora Poot, académica de larga carrera, es una de las más grandes conocedoras de la obra arreolina en todo el mundo. De hecho, miles de lectores nos hemos adentrado en esa obra precisamente con los comentarios de Poot como guía, y la hemos entendido mejor gracias a ello.
(Yo me encontré en la infancia una edición de Mi Confabulario, antología personal de Arreola prologada por Poot, que fue mi primera clase de literatura de mi vida. No la olvidaré.)
Para buscar en la FIL
En 2015, la editorial Jus publicó la edición más reciente que hay de El último juglar, un curioso libro de memorias que Orso Arreola creó a partir de una larga serie de conversaciones con su padre. Es un tesoro: Juan José Arreola siempre fue famoso por su elocuencia y sus conversaciones en vivo, y El último juglar contiene ese aspecto de su fama en estado casi puro.
Si lo encuentran, me avisan.
ASS