Taibo II: “Soy dicharachero, alburero y provocador”

Literatura

El escritor presentó su libro 'Los alegres muchachos de la lucha de clases', el retrato de una generación.

Paco Ignacio Taibo II, director del FCE. (Foto: Ariel Ojeda)
Guadalajara /

Fiel a su estilo, Paco Ignacio Taibo II se da un tiempo para fumar antes de hablar de Los alegres muchachos de la lucha de clases (Planeta) en el marco de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara. Es un libro que recupera sus memorias, desde el luchador, pasando por el periodista, hasta el día en que el presidente Andrés Manuel López Obrador lo invitó a trabajar con él.

¿Por qué decides desnudarte frente al lector con una autobiografía?

No es un fenómeno de encueramiento autobiográfico. Es un intento de hacer un retrato generacional. No quería hacer una autobiografía, quería hacer un retrato de generación. Mucho está en primera persona, vivido y actuado. Hay una mezcla y eso obligaba a que de repente pusiera en el libro un material anecdótico muy personal.

Retratas una época. Huelgas, plantones, la relación con tu padre… ¿Te divertiste al escribir tus recuerdos?

Sí, fue divertido, pero siempre pensando qué tanto voy a dejar fuera. La intención era hacer un retrato de generación y no un ensayo sobre el 68.

¿Qué significa para ti Los alegres muchachos de la lucha de clases?

El momento en el que me detengo a pensar y me incluyo dentro de lo que pienso, cosas que había dejado de lado. Normalmente uno trabaja con la memoria social y registra las luchas estudiantiles, los movimientos sindicales, los trabajos en el mundo de la cultura, y este libro lo que hace es ¿y mi memoria?, la cual se va desvaneciendo como queso gruyere conforme pasan los días.

¿Crees que con el libro van a entender quién eres?

No, no se trata de eso. Se trata de decir que somos una generación cuya gloria está en haber sido resistente durante muchos años y aguantar las presiones de “ya, bájale”, “ya, ablándate”, “ya, entrégate al sistema”. Una parte de la generación ahí se fue, se pudrió, pero la enorme mayoría se ha resistido con bastante dignidad al paso del tiempo.

Eres un hombre polémico como escritor y funcionario. ¿Te gusta serlo?

Soy dicharachero, alburero y provocador. Ya no es un problema de te gusta o no te gusta. Es un problema de cómo reaccionas frente a ciertas cosas. Sí, yo tengo la lengua rápida, fácil y envenenada, es cierto, pero ¿por qué debería renunciar a ella?, ¿por qué debería someterme a un pacto de oscuridad? Yo solo soy el que escribe y vivo en mi casa encerrado.

¿Qué pasó con la visita de Claudia Sheinbaum a la FIL Guadalajara?

Le mandé el libro cuando estaba terminándolo, una de las pocas gentes que lo conocieron antes. Con Claudia tengo muchos años de una fuerte amistad y le dije: “No es tu generación pero sí es tu historia, de ahí vienes”. Lo leyó y le pregunté si quería presentarlo en Guadalajara, va a ser un broncón divino. Me explicó que checaría su agenda y al final fue un problema de agenda, pero hubiera estado bueno. Creo que habrá tiempo para que Claudia se reconecte con el mundo del libro. Lo hará en estos meses, es lectora.

¿Estás contento con todo lo que has hecho?

Sí, pero, de repente, la rodilla izquierda siento que está oxidada, me sube el azúcar y ando todo baboso durante horas. Empiezo a tener achaques producto de la edad y eso va contra el mito Paco Taibo. ¿Cuál es? Si hay que llegar a algún lugar ahí estuvo Paco antes y ya salió.

ÁSS

  • Vicente Gutiérrez
  • vicente.gutierrez@milenio.com
  • Periodista desde hace 25 años y especialista en temas culturales, la industria del entretenimiento y cinematográfica. Por su experiencia y conocimiento, también ha participado en temas de política y de negocios. Es reportero de cultura en Milenio y locutor en “La Taquilla”, programa de Radio Fórmula 104.1 FM.

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