Desde que en 2005 se creó la Fundación Unidos por el Arte contra el Cáncer Infantil (UNAC) en Monterrey, Florencia Infante de Garza consideró importante establecer un vínculo entre la creación y la enfermedad que trastorna a muchos pequeños en México, con el deseo de ofrecerles una esperanza de vida a los menores diagnosticados con leucemia.
Comprendiendo este padecimiento en niñas y niños, Infante de Garza, presidenta de la Fundación UNAC, asegura que el arte es uno de los recursos más importantes para producir solidaridad y empatía a través de la belleza, pues contribuye a que la mirada de los pequeños se fije en ella y puedan tener momentos de serenidad, tranquilidad y ocupación mental frente al dolor que generalmente le causan los tratamientos.
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“Con toda esa concepción filosófica y estética hemos convocado a lo largo de los años a diversos artistas, justamente para poder, con su arte, ofrecerle a los niños con problemas, con dolores y sufrimiento, un aliento de esperanza, color, imaginación y ensoñación”.
Generosidad
Hace más de una década comenzó a contactar a artistas destacados. Ha reunido a 45 bajo el tema Ponte la gorra que tiene un gran significado, ya que los niños quieren decir: “ponte en mi lugar, piensa en mí, imagínate cómo me siento porque se me cae el pelo”.
Artistas como Francisco Toledo respondieron a este proyecto para la procuración de fondos. Donó su arte para que fuera impreso en 15 gorras. “Su solidaridad fue impresionante porque al pedirle que pintara una gorra para los niños su respuesta fue que pintaría 15 para que un grupo de mujeres oaxaqueñas las bordaran; él era uno de los hombres más comprometidos socialmente. También llegamos a un acuerdo extraordinario de ayudarlas a ellas”, recuerda.
Infante de Garza afirma que esas gorras son excepcionales porque no existen más, pues Toledo solo las pintó para esta causa: el arte para atender el cáncer infantil.
Los artistas en general se suman donando una obra de arte que ellos seleccionan y lo hacen con su firma original, incluida una carta en la que le permiten a UNAC utilizar la imagen de la pieza.
“Obra maravillosa”
Recientemente Roberto Cortázar, artista chiapaneco que forma parte de la Colección MILENIO Arte, donó la escultura Figura masculina de pie (cabezas) no. 2, elaborada este año en bronce patinado.
“Es realmente una obra formidable, está compuesta por cinco cabezas, generando una familia, y su característica es que le permite al espectador verla de cerca y lejos de manera diferente. La UNAC le agradece por haberse sumado a esta labor, lo cual me recuerda a Dostoyevsky, quien decía: ‘La humanidad sin belleza no tendría posibilidad para vivir, porque la belleza le crea un espíritu especial’”.
Roberto Cortázar respondió con generosidad a la invitación de la UNAC y trabajó en esta “obra maravillosa”, dice Infante de Garza. La pieza se rifó el mes pasado con la intención de que los recursos recaudados se donaran a la atención de niños con cáncer.
La idea de Cortázar, comenta la presidenta de la Fundación UNAC, es hacer un llamado a los artistas contemporáneos que trabajan activamente, se vinculen y contribuyan a esta labor para tratar el cáncer infantil.
“Hoy necesitamos que la belleza se proyecte y que los artistas generosos se vinculen con este tipo de filantropía, ya que hacen que la gente mire la vida con esperanza”.
Con Fernando Botero
Cada artista tiene una historia especial al vincularse con la UNAC, ya que la finalidad es reunir fondos para ayudar en sus tratamientos a niños con cáncer, especialmente leucemia, y en particular para contribuir a los pagos de los trasplantes, que representan un costo elevado.
El proyecto Ponte la gorra ha tenido gran éxito al contar con la participación de artista como Fernando Botero, destaca la presidenta de la Fundación UNAC.
“En el caso de Botero es algo muy especial y digno de destacar, porque fueron dos obras que nos permitió replicar en una gorra con su firma, lo que fue realmente maravilloso”.
Infante de Garza dice que en 2021 la UNAC y el Museo de Bellas Artes MOA de Atami, en Japón, unieron esfuerzos para que niños y niñas mexicanos, algunos de ellos con cáncer, participaran en el Concurso Internacional de Pintura Infantil que organiza ese recinto a fin de incentivar la paz y el amor a través del arte.
El certamen convocó a más de medio millón de menores de todo el mundo, y la ganadora fue la niña Maya Martínez, de 11 años de edad, originaria de Monterrey.
hc