Jaime Humberto Hermosillo, uno de los cineastas mexicanos más prolíficos, murió en Guadalajara. Así lo dio a conocer la Secretaria de Cultura, Alejandra Fausto, a través de sus redes sociales; las causas aún no son reveladas, pero desde hace tiempo, el realizador se encontraba delicado de salud, una de sus ultimas apariciones fue en el Festival Internacional de Cine de Guadalajara, donde se le rindió un homenaje con la proyección restaurada de Doña Herlinda y su hijo.
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Gracias a esta historia, el realizador entregó al público mexicano una de las primeras películas donde el tema de la diversidad estuvo presente. La historia estrenada a mediados de los 80 permite al espectador conocer la relación de Rodolfo y su amigo Ramón, a quien doña Herlinda trata como un segundo hijo, pues se niega a reconocer que su Rodolfo es homosexual. Ante las presiones de su madre, Rodolfo se casa con Olga, pero su relación con Ramón continúa. A esta historia se sumaron otras como La tarea, De noche vienes Esmeralda, Naufragio y María de mi corazón.
Por años, su trabajo encontró salida en la pantalla grande, pero durante la última década el cineasta recurrió a los nuevos formatos para dar salida a sus historias: del celuloide pasó al cine digital y se valió de nuevas formas de distribución, incluso filmó una de sus últimas películas con la ayuda de una cámara Go-Pro, la cual estrenó en Internet de forma gratuita para no frenar lo que por más de medio siglo fue su pasión: hacer cine.
“Me propuse continuar mi carrera en el cine independiente, con recursos que no requieren del celuloide, gracias al cine digital es posible hacer una película con mayor libertad y de la forma de quieres. Así surgió esta película Un buen sabor de boca, una historia que grabamos con Go-Pro y con la cual me convierto también en distribuidor, con la creación de La ideal. Es una forma muy buena para que las películas sean vistas”, dijo en una entrevista pasada Jaime Humberto Hermosillo.
“Dadas las circunstancias del cine y su industria, quise también convertirme también en mi propio distribuidor, por eso abrí una cuenta de correo electrónico en la que se estableció contacto con personas en México y en extranjero y les envío enlaces para que vean mis películas y eso nos favorece a los creadores para tener esa retroalimentación. La distribuidora se llama La Ideal, era el nombre de la panadería que mi familia atendía, yo la atendía en mi juventud y ahora es el nombre de mi distribuidora”, agregó quien en su momento fue uno de los primeros cineastas en distribuir vía Internet sus películas.
Durante sus años de juventud, Hermosillo se acercó al cine, “en aquel entonces empezaba a verse el cine en la televisión, no había televisión en color y ahora el destino nos alcanzó y podemos ver en nuestra casa el cine”, decía sobre el streaming, para luego añadir que el cine no pierde su encanto de reunir al público en una sala para experimentar las historias, porque “compartir esa sensación de olvidarnos de quién está a un lado y ser parte de lo narrado es increíble, pero ahora hay la posibilidad de verlo en casa, de verlo en computadora, tabletas o en el celular si así se desea”.
Jaime Humberto Hermosillo pasó sus últimos días compartiendo en las aulas su pasión por le cine. Fue profesor de la Universidad de Guadalajara, donde también radicó hasta el día de su muerte. Además, fue guionista, editor, productor y actor, recibió el premio Ariel a la mejor dirección por La pasión según Berenice.
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