Cuando de cuentos de hadas se trata, todos recordamos los que han sido llevados a la pantalla grande como ‘Blancanieves’, ‘La Sirenita’, ‘La bella durmiente’, ‘La bella y la bestia’, ‘Rapunzel’, ‘La Cenicienta’, entre otros. Sobre todo por el final feliz que todas esas historias tienen.
Al darnos a la tarea de investigar sobre los distintos orígenes de algunos relatos, nos encontramos con Charles Perrault, de quien sus versiones han sido más adaptadas por Disney, haciendo cintas que son aptas para todo público debido a su simplicidad y los desenlaces satisfactorios.
Sin embargo, varios internautas han criticado la forma de romantizar el género a través de las narrativas, haciendo que la perspectiva de vida abordada en los filmes no sea realista, lo que podría provocar una distorsión en los infantes que en su mayoría ven este tipo de películas.
Las versiones de ‘La Cenicienta’
Mucho se ha escrito sobre el origen del cuento, de igual manera hay registro de varias versiones sobre la historia de ‘Cenicienta’, comenzando desde la Antigua Grecia con una versión oral de ‘Ródope’, la cual fue registrada por el geógrafo griego Estrabón en su obra ‘Geographica’, en ésta relata como una águila arrebata una sandalia a una de las criadas, llevándola al regazo del rey, situación que hace que busque a la mujer dueña del zapato para finalmente casarse con ella.
Otras de las versiones es la de ‘Aspasia de Focea’, que relata la historia de una niña que soñaba con casarse con alguien de la realeza, hasta que asiste a una fiesta y es en ese momento que el hombre que regía el país fija su mirada en ella. ’Le fresne’ llega varios siglos después en Francia, teniendo un desenlace feliz.
Los cuentos asiáticos también tienen historias similares, como la de ‘Ye Xian’, una joven que abusada por su madrastra se hace amiga de un pez que es la reencarnación de su madre recién fallecida, sin embargo, la nueva esposa de su padre y su hermanastra matan al animal, encontrando los huesos se da cuenta que son mágicos por lo que les pide un deseo y la visten correctamente para ir a un evento en la Casa Real. Al ser reconocida por su familia adoptiva huye rápidamente del lugar perdiendo su zapato de seda. El rey la encuentra y se casa con ella, mientras que su madrastra y media hermana son asesinadas por peces voladores.
’Las mil y unas noches’ también ha sido relacionado con Cenicienta, debido a un escrito que relatan el abuso presentado a un hermano menor por parte del resto de los integrantes de la familia, en ‘Judar y sus hermanos’ el final feliz no es opción, pues termina siendo envenenado por sus hermanos mayores.
’Tam y Cam’ es la versión de Vietnam y es una historia similar a la china, a diferencia de que en este cuento Tam es asesinada en manos de su hermanastra y madrastra, reencarnando en varias veces en pájaro, telar y una manzana de oro, hasta que finalmente se encontró con el rey y vivieron felices para siempre.
La versión iraní ‘Frente de Luna’ también aborda las dos figuras clave de la familia, sólo que el miembro de la Familia Real se termina casando con la protagonista después de haberla visto en una boda.
Las historias más crueles sobre ‘La Cenicienta’
Giambattista Basile es uno de los autores más recordados por su narrativa, siendo polémico por la historia de ‘Sol, luna y Talía’, relatando una historia similar a la de ‘La Bella Durmiente’. En su historia llamada ‘La Gata Cenicienta’ está llena de manipulaciones, traiciones y falsas promesas.
Pero la menos escuchada y más terrorífica ha sido la de Los hermanos Grimm, en su cuento titulado ‘Ascheputtel’, que sigue la misma secuencia que el resto, pero a diferencia de las anteriores, éstas terminan con un mar de sangre cuando el rey en búsqueda de la dueña de la zapatilla la madrastra corta los dedos del pie de una de sus hijas y el talón de la otra. El miembro de la Realeza lo notó al ser avisado por unas palomas mensajeras, al regresar es Cenicienta quien es la dueña del zapato extraviado. Finalmente la familia adoptiva es acechada por los mismos animales informantes sacándoles los ojos y dejándolas ciegas.