Tras ocho meses de trabajo intenso, el Ballet de Monterrey concluyó la parte del proceso creativo y de ensayos para presentar en el Teatro de la Ciudad de Monterrey la obra “Maximiliano y Carlota”, con coreografía de Thiago Soares.
Obra con estilo neoclásico, muy cerca del clásico, que estará en este escenario, además de su estreno del 28 de septiembre, y la función del 29, el día 30 del mes en curso, así como el 1, 7 y 8 de octubre.
- Te recomendamos Con TECgpt se convierte Tec de Monterrey en pioneros al tener su IA Tecnología
“Es un momento muy importante para el Ballet de Monterrey, un momento de mucha emoción y un momento de conclusión de un proceso de 8 meses de trabajo, y todavía más por ser un tema tan importante para el recuerdo de un país con una cultura tan fuerte como la de México”, indicó el artista brasileño.
El cual, aún con “poco de nervios” previo al estreno compartió a la plataforma MILENIO-Multimedios su emoción, pero sobre todo, su agradecimiento por poder, de alguna manera, contribuir con este montaje en el impacto histórico de esta pareja.
“Estoy muy agradecido de poder dejar una contribución de una obra que habla de amor, de historia, que habla de todos los elementos que en algún lugar están en el pasado, en el presente y en nuestro futuro.”
“Yo espero mucho que el público pueda disfrutar la idea, el concepto, y también entrar en la narrativa romántica y la parte poética de la obra”, comentó.
Para este trabajo, compartió, de su parte estuvo crear la coreografía, pero es una obra que se hizo con una gran colaboración, con la música original de Caleb Ruiz, con Marco Reyna como diseñador de vestuarios y sets de escenografía, y con Mario Nevárez, “un iluminador bastante conocido, un tipazo, muy sensible”.
“Es un proyecto grande y claro, siempre con el apoyo del Patronato, del Comité, de Yolanda Garza, de verdad que es un momento de celebrar y estar con nuestro público.”
“Para que disfrute este espectáculo que tiene tragedia, amor, romance, historia, y con la ficción necesaria para crear una narrativa en escena”, mencionó.
Sobre el estilo, remató, va muy cercano a su esencia, es decir, al ballet clásico, y la apuesta tiene un factor clave en la dramaturgia.
“Aquí vamos en un ballet donde el lenguaje es neoclásico, más para clásico, es una obra que tiene lenguaje más cerca de donde vengo yo que es del ballet clásico tradicional.”
“Es una obra dramática, con Maximiliano y Carlota la dramaturgia de los eventos que pasaron son los que conducen la historia, es decir, los pasos se traducen en sentimientos”, precisó.
Por último, el coreógrafo y bailarín con amplia trayectoria se mostró convencido que este montaje no solo se presentará en Monterrey, así que aprovechó para invitar al público de Nuevo León y de México a ser parte de este momento inolvidable.
“Invito a todo el público de Monterrey, y de todo México, seguramente esta obra va a ser vista por muchos públicos diferentes, así que venir a disfrutar con nosotros este momento único”, puntualizó.