La OSEM hará jazz sinfónico

Director de la Orquesta Sinfónica del Estado de México (OSEM), Rodrigo Macías asegura que estar al frente de la agrupación ha sido el reto más importante de su vida: “Es una orquesta de primer nivel, y yo me siento muy entusiasmado: la gente tiene ganas de trabajar y hacer cosas nuevas”, dice.

Entre sus proyectos está diversificar programas, incrementar las giras, grabar discos, presentar ópera y realizar proyectos innovadores, como el Festival de Verano. Macías explica que se trata de una propuesta inédita de la OSEM, con cuatro conciertos gratuitos que iniciaron la semana pasada.

El viernes a las 20, la OSEM presentará Jazz sinfónico en el Teatro Quimera de Metepec, y el domingo en la Plaza Central de Valle de Bravo a las 12:30 horas. Participará el baterista Israel Varela con su trío. Nacido en Tijuana y radicado en Roma, ha tocado con músicos como Pat Metheny, Charlie Haden, Bireli Lagrene y muchos otros jazzistas y músicos de flamenco.

Macías, quien ha seguido de cerca la carrera de Varela, considera que es “un joven muy talentoso y lo contactamos porque nos pareció una buena opción. Su obra es un jazz flamenco y latino que me parece muy interesante. También tocaremos standards de jazz en arreglos sinfónicos, extractos del Concierto de Aranjuez, de Joaquín Rodrigo, y piezas clásicas con influencias del género”.

El director nacido en Texcoco considera que con este tipo de conciertos, donde la orquesta se relaciona con otras músicas, “la OSEM se acerca más a otro tipo de público. Queremos que la gente que no va normalmente a los conciertos de la orquesta tenga en estas cuatro presentaciones un pretexto para escucharla y enamorarse de ella”.

Para la OSEM estas presentaciones cobran relevancia también por su carácter masivo, abunda el también compositor: “Por ejemplo, el Teatro Morelos, aunque es un espacio cerrado, tiene capacidad para casi dos mil 500 personas; el Teatro Quimera, casi dos mil, y en Valle de Bravo esperamos mucha gente porque será en domingo al aire libre en la velaria municipal, en pleno centro de la ciudad”.

Macías afirma que estas presentaciones equivalen a “sacar a la OSEM de la sala de conciertos. Son para toda la familia, sin distingos. El único requisito es contar con el valioso tiempo de la gente y el ánimo de escuchar música en vivo. Vivimos rodeados de música: en el auto, el teléfono, el trabajo, en restaurantes, elevadores, supermercados, etcétera, pero nada de eso cambia la experiencia de la energía de la música en vivo, menos cuando se trata de un orquesta de 90 elementos”.