Aksenti: tres décadas de danza y música

Nacido en Detroit, Duane Cochran vino a México muy joven para pasar 15 días de vacaciones y lleva 43 años viviendo en nuestro país.

Cochran se graduó como pianista en la Universidad de Michigan, donde también tomó clases de danza. Estudió en la Martha Graham School de Nueva York; en la Ciudad de México ingresó al Ballet Danza Estudio de Bernardo Benítez, quien se convirtió en su maestro no sólo de baile sino también del arte de crear coreografías.

Duane Cochran es actualmente pianista titular de la Orquesta Filarmónica de la UNAM, además de director y coreógrafo de Aksenti Danza Contemporánea, agrupación fundada por él mismo y que en 2021 cumplirá 30 años de existencia.

Para celebrar esas tres décadas, Cochran y sus cómplices tenían pensado tirar la casa por la ventana durante 2020 y 2021, pero se atravesó la pandemia y los bailarines tuvieron que practicar confinados en sus casas, en espera de tiempos mejores.

Ante un presente tan aciago, la compañía decidió repasar su memoria colectiva en Andanzas y remembranzas. 30 años de Aksenti Danza Contemporánea, serie de ocho videos que podrán ser vistos próximamente, uno por semana, en Facebook, YouTube e Instagram. En dichos materiales se muestra de manera cronológica una historia que inició en 1991 con muy buenos augurios, pues ese mismo año ganaron el XII Premio Nacional de Danza INBA-UAM, gracias a la coreografía Lazos, de Cochran.

Cuando Aksenti celebró sus primeros diez años, el afamado crítico Alberto Dallal (Ciudad de México, 1936) escribió que las coreografías de Cochran, agrupadas en el espectáculo Decanato, “representan estados de ánimo, actitudes frente a la existencia y el arte, momentos narrativos y, sobre todo, creación de imágenes danzadas cuya exposición a los espectadores propicia la asimilación de temas concretos: amor, ternura, enfrentamiento, regocijo”.

Dallal considera que el estilo de Cochran como coreógrafo “es, por así decirlo, ortodoxo dentro de la danza contemporánea; nada falta, nada sobra en el enjambre de movimientos en el escenario y en sus relaciones, unívocas, con la estructura musical” (La Jornada, 4-08-2001).

La celebración por 20 años de Aksenti se llevó a cabo tanto en el Teatro de la Ciudad como en la sala principal del Palacio de Bellas Artes; ofrecieron entonces el espectáculo multidisciplinario La casa de Betty, cuyo nombre surge a partir de una pintura de Rafael Zamarripa, con ecléctica música que va de Earth Wind & Fire al Chapo de Sinaloa, así como textos de Jorge Luis Borges, Robert Frost y Nuria Gómez Benet.

Para festejar un cuarto de siglo montaron la coreografía El reflejo inefable, con música de Alfred Schnittke (Concerto Grosso núm. 1), y Nisi Dominus, con las notas de la obra homónima de Antonio Vivaldi; se presentaron junto con la Orquesta de Cámara de Bellas Artes en el teatro Julio Castillo. Con ese mismo programa, en junio de 2019 estuvieron otra vez en el Palacio de Bellas Artes.

A lo largo de su historia, Aksenti Danza Contemporánea ha recibido tres veces la beca del Programa de Fomento a Proyectos y Coinversiones Culturales del Fonca. Aunque Duane Cochran es miembro del Sistema Nacional de Creadores de Arte 2019-2022, se muestra preocupado por los recortes presupuestales para la producción cultural. Aksenti, dice, vive una situación muy comprometida por el paro de labores y en su futuro sólo existe la propuesta de hacer presentaciones en diciembre, en el Centro Nacional de las Artes, “¡a taquilla y con sólo 30 por ciento de butacas disponibles!”.

ÁSS