Joaquín Sabina, memoria y tango: una noche entrañable

VIII Congreso Internacional de la Lengua Española

El Homenaje a Joaquín Sabina en el Festival de la Palabra se convirtió en una noche memorable frente a un atiborrado Teatro del Libertador General San Martín.

Un cierre apoteósico de la noche de Joaquín Sabina en el Festival de la palabra. (Cortesía: CILE)
Córdoba, Argentina /

La noche del viernes terminó, en el Teatro del Libertador General San Martín, con el “Homenaje a Joaquín Sabina”, un espectáculo de música y poesía en el que participaron el propio cantautor español, Luis García Montero, Benjamín Prado, Elvira Sastre y Liliana Bedini, quienes alternaron con los cantantes Carlos Habiague, Silvia Lallana, Gustavo Vicentín, Marcelo Santos y Adriana Valera. Ellos interpretaron tangos acompañados por la Orquesta de Cuerdas de la Municipalidad, dirigida por Santiago Ruiz, y por los bandoneonistas Damián Torres y Pablo Jaurena, dentro del Festival de la Palabra, durante el VIII Congreso Internacional de la Lengua Española.

Fue una noche divertida, en un teatro atiborrado. En una esquina del escenario se montó una mesa de bar donde Sabina, primero con Luis García Montero y luego con Benjamín Prado, intercambió versos y elogios y leyó algunos de sus poemas y canciones. Entre ambos diálogos, risueños y relajados, la española Elvira Sastre y la argentina Liliana Bedini leyeron sus propios versos. Y entre los diálogos y la poesía, el tango.

“Poeta de las ciudades” le decía el locutor a Joaquín Sabina, quien sentado en a primera fila vio interpretar algunas de sus canciones con arreglo de tango, “esa música que hace muchos años se metió en mi memoria”, diría con voz de lija.

El primero en cantar fue Carlos Habiague, joven y de potente voz, quien cantó los tradicionales “Sur” y “Pasional” y el clásico de Sabina “Donde habita el olvido”. Continuó Silvia Lallana, de rojo imponente, con “Afiches”, “Volver” y otro de los grandes éxitos de Sabina “Y sin embargo”.

En ese ir y venir de la música a la poesía, Marcelo Santos cantó dos estrenos del homenajeado: “Hace tiempo” y “Mereció la pena” y Gustavo Vicentín interpretó “Tan joven y tan viejo” y preparó el terreno para la aparición de Adriana Valera, vieja amiga de Sabina. Ella cantó “Malena”, “Garganta y arena” y de Sabina: “”Una canción para Magdalena” y “Contigo”.

Y cuando todos pensaban que el espectáculo que ya había terminado, Adriana llamó a los otros cantantes y a Sabina para cantar juntos “Con la frente marchita”, en un cierre apoteósico de la noche de Joaquín Sabina en el Festival de la Palabra.

ÁSS​

  • José Luis Martínez S.
  • Periodista y editor. Su libro más reciente es Herejías. Lecturas para tiempos difíciles (Madre Editorial, 2022). Publica su columna “El Santo Oficio” en Milenio todos los sábados.

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