En la Primera Guerra Mundial murieron millones de hombres, los viejos imperios se desmoronaron y surgieron nuevas naciones y nuevas ideologías.
El 28 de junio de 1914 fue asesinado el archiduque Francisco Fernando de Austria en Sarajevo. Este fue el detonante del conflicto que comenzaría un mes después, el 28 de julio, con la declaración de guerra del imperio austrohúngaro a Serbia.
Como nunca, la tecnología perfeccionó la maquinaria de la muerte y el imaginario popular se avivó con las llamas de la literatura, la música y el cine. Con canciones como la melancólica Lilí Marlene de Hans Leip —interpretada por Marlene Dietrich— escrita por un joven soldado a la novia ausente.
Los testimonios y relatos sobre la Gran Guerra son conmovedores, de muchos de ellos se hicieron películas en las que el horror pero también la solidaridad están presentes. Una de ellas es Sin novedad en el frente, basada en el libro homónimo de Erich Maria Remarque, en la que un grupo de jóvenes se alista en el ejército alemán para defender el honor de su país, siendo muy pronto víctimas del desencanto.
Una de las obras más aclamadas de Ernest Hemingway es Adiós a las armas, la trágica historia de amor entre un conductor de ambulancias y una enfermera de la Cruz Roja. La novela ha sido llevada al cine en dos ocasiones, en 1932 protagonizada por Gary Cooper y Helen Hayes y en 1957 con Rod Hudson y Jennifer Jones.
Entre las películas más estremecedoras está Johnny tomó su fusil, de Dalton Trumbo, basada en su novela del mismo título. Es la historia de un soldado que durante la Primera Guerra Mundial, en una explosión pierde las extremidades y los sentidos, pero no la lucidez. Con los años adquiere la capacidad de comunicarse moviendo la cabeza hacia atrás y hacia adelante en clave Morse, para clamar por una muerte que nunca llega.
La vida del aventurero y escritor Thomas Edward Lawrence, quien en su libro Los siete pilares de la sabiduría cuenta sus experiencias en la lucha de británicos, franceses y árabes contra turcos y alemanes durante la Gran Guerra, dio lugar a la extraordinaria película Lawrence de Arabia, dirigida por David Lean y protagonizada por Peter O’Toole y Omar Sharif, en la que los sueños de una Arabia independiente se desvanecen en la arena del desierto.
Una de las películas más recientes sobre la primera conflagración mundial es la espectacular War Horse, de Steven Spielberg. A través de la relación de un joven inglés con su caballo, que es vendido por su padre a un oficial que marcha a la guerra, se aborda el anacronismo de la caballería y la terrible crueldad de los hombres supuestamente civilizados, aunque también se exploran la amistad y el amor.
La Gran Guerra fue una dramática lección en contra de la violencia, lamentablemente muy pronto fue olvidada y el horror volvió a instalarse en el mundo con una Segunda Guerra Mundial y muchos otros conflictos, como el que ahora mismo devasta a Ucrania, invadida por las fuerzas rusas.
AQ