Mila La Morena es una artista emergente cuyo sonido —una mezcla de R&B, reguetón, electrónica y pop con letras en spanglish— la ha popularizado en poco tiempo. Originaria de Chicago, Mila no olvida ni sus raíces mexicanas ni la mezcla cultural en la que creció, y desde sus primeros pasos en la industria fue importante remarcar sus orígenes y rendirles homenaje, así como explorar su identidad queer.
Mila arrancó el año con lanzamientos como “In Luv with you”, “Paz”, y “Caíste del cielo”, todos temas con un solido mensaje de fuerza y empoderamiento, saturados de un sonido tan vanguardista como pegajoso. Ahora llega “Freakygirl”, canción que gira en torno al amor propio y la admiración hacia las personas que no temen exploran su sexualidad. Mila nos adentra un poco más en su proyecto:
— Háblanos de la música que escuchabas con tu familia.
Mi mamá es de Veracruz y escuchaba a artistas como Juanes, Maná o Café Tacvba, pero también música en inglés o ritmos de su tierra. Entonces la variedad de lo que yo escuchaba de chiquita fue diferente de mis amigos, ahí comencé a interesarme por los tonos latinos.
— Y ya que los mencionas, ¿Qué música escuchabas en el barrio?
Así como mi mamá escuchaba música diferente, yo compongo ritmos que se sienten muy distintos. Pienso que los primeros artistas que realmente despertaron algo en mí fueron pop stars como Britney Spears o Shakira, también me gustaban mucho los ritmos de indie rock de aquellos años.
— Hablando de “Freakygirl”, a mí me gustó precisamente la mezcla de sonidos. ¿Cómo llegaste a tu estilo?
Pienso que en “Freakygirl” lo que la hace concisa es la actitud. La manera de ser coqueta pero agresiva y también alternativa. Los sonidos son electrónicos, pero muy sucios, como cyberpunk, un poco roquero, pero también hay ritmos de reguetón. Fue muy difícil cantarla para mí porque los timbres no son muy bonitos, pero fue perfecto para mi estilo como persona y artista. Cuando el productor Hhunter estaba componiendo el beat, estaba pensando en mi onda. Hablamos de música electrónica, pero también de neo-perreo, algo con cierto toque agresivo.
— ¿Tú cómo has asumido el reguetón?
Cuando estaba chica escuchaba a Daddy Yankee. En ese tiempo sentía que había mucho apoyo entre la gente latina, que nos unía aquella música y eso estaba chido, eso nos conectaba. Para mí esos ritmos eran bonitos, incluso antes de Bad Bunny; luego vino el neo-perreo y ahora siento que la vibra es más alternativa y más libre.
AMS