Un divertido clásico europeo; memorias del exilio y los tiempos cambiantes; una apasionada semblanza del Mediterráneo; una generación que maduró con la barbarie; el libro detrás de una cinta protagonizada por Robert Redford y Meryl Streep; el Oscar Wilde mexicano; la amistad entre Jean-Claude Carrière y Luis Buñuel… conoce los libros que recomienda Laberinto esta semana.
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Historia de mi vida
No estamos solo frente a un valioso retrato de la sociedad europea de la segunda mitad del siglo XVIII sino a un clásico de la literatura. Mientras el seductor, chantajista y viajero da cuenta de sus hazañas sexuales, y también de sus descalabros, va haciendo desfilar a una fascinante galería de personajes, lo mismo consentidos de las cortes que clérigos, gente del pueblo, funcionarios y artistas de todo cuño. La amenidad se conjuga con la voluntad de no guardarse nada.
Memorias de ultratumba
Un monumento a la melancolía y a la ironía punzante. Escritas entre 1809 y 1841, nacen de la experiencia del diplomático y novelista como exiliado en Estados Unidos, consejero de Napoleón y, más tarde, ministro del reinado de Luis XVIII. Estas memorias son, en el amplio sentido de la palabra, una revancha contra los estragos que causa el tiempo. Precursoras del romanticismo, expresan el encanto por la democracia estadunidense y el desencanto frente a los horrores que trajo la Revolución francesa.
Historia de San Michele
Nacido del insomnio y de las heridas psicológicas que dejó la Primera Guerra Mundial, y fechado en la década de 1920, este libro es más que la autobiografía de un médico obsesionado con la muerte; se trata de una apasionada semblanza del Mediterráneo, sus lugares emblemáticos y sus pobladores. Munthe, pues, no escribe sobre sí mismo sino sobre un mundo que vacilaba entre lo real y lo inverosímil, simbolizado por la villa San Michele, antigua residencia de Tiberio y refugio veraniego de Greta Garbo.
El mundo de ayer
Aunque ocupa el centro de estas memorias, Zweig tiene el propósito ineludible de hacer el retrato de una generación, la misma que vivió con espanto la Primera Guerra Mundial y más tarde presenció el ascenso del nazismo. Escribe desde su exilio en Brasil y en ningún momento puede evitar la zozobra que le causa mirar cómo la Europa de la razón y la clarividencia artística ha sido poseída por la barbarie. El destino individual se funde con las grandes transformaciones históricas.
Memorias de África
Bajo la apariencia de una novela, la escritora danesa evoca sus años en África Oriental, aún bajo el dominio inglés. Estamos en las colinas de Ngong, muy cerca de Nairobi, en una plantación de café. Lo que inicia con safaris lujosos y un negocio próspero no tarda en convertirse en un infierno, sobre todo porque el matrimonio de Dinesen se iba a pique. Las vívidas descripciones de las costumbres nativas son un tributo a una tierra que conquistó emocionalmente a muchos europeos.
La estatua de sal
De entre los libros de memorias de los escritores mexicanos éste es el más sorprendente por su tema: la homosexualidad. Antes de su publicación oficial, estas revelaciones clandestinas circularon parcialmente en grupos de defensa de derechos de los homosexuales. Como Wilde en su momento, Novo fue un provocador en el suyo y nunca ocultó su condición. Él es el protagonista, pero por sus páginas igualmente aparece Xavier Villaurrutia, su compañero de correrías.
Mi último suspiro
Publicadas en 1983, estas memorias cobraron forma una vez que Buñuel y Jean-Claude Carrière estructuraron las conversaciones que sostuvieron tras 18 años de amistad. La infancia, la guerra, García Lorca, Dalí, los sueños, los primeros proyectos, el catolicismo y la política no escapan a la mirada del cineasta de Calanda, siempre reforzada por una visión surrealista del mundo. Las verdades absolutas están desterradas de estos recuerdos que trascienden el cine.
El río. Novelas de caballería
Como otros escritores centroamericanos, Luis Cardoza y Aragón desarrolló su carrera como escritor en México, pero, viajero incansable, antes de asentarse en nuestro país vivió en París, el otro sitio axial en su vida, pues allí decidió tomar por completo el camino de las letras. La parte dedicada al ambiente cultural mexicano resulta esencial, pero su estancia parisina no le va a la saga. Su figura fue clave para comprender la relación entre los poetas de medio siglo y las vanguardias.
AQ