¿Quién es la enigmática Elizabeth Finch?

Al margen

Julian Barnes crea un personaje entrañable y al mismo tiempo realiza una crítica severa contra la intolerancia y las fantasías que pueblan la historia.

Portada de 'Elizabeth Finch', de Julian Barnes. (Anagrama, 2023)
Alma Gelover
Ciudad de México /

Elizabeth Finch (Anagrama, 2023), es la nueva novela de Julian Barnes, una de las voces mayores de la actual narrativa inglesa, autor de El loro de Flaubert, Nada que temer y Con los ojos bien abiertos, entre otros libros que dan cuenta de sus variados intereses y de los géneros en los que ha incursionado: novela, cuento, ensayo, memoria.

Elizabeth Finch es el nombre de una maestra que un día aparece frente a un grupo de alumnos de entre treinta y cuarenta años para impartir el curso “Cultura y civilización”; amante del mundo clásico, es elegante, directa, fumadora, celosa de su vida privada. “Su dicción era formal, la estructura de las frases enteramente gramatical: de hecho, casi podías oír las comas, los puntos y coma y los puntos. Jamás comenzaba una frase sin saber cómo y cuándo terminaba. Y, sin embargo, no parecía nunca un libro con patas”, escribe Neil, su alumno y narrador de esta historia que indaga en la vida de Elizabeth pero también en la del emperador Juliano el Apóstata, por quien ella sentía gran admiración y cuya muerte significó la derrota del paganismo y la expansión del cristianismo en el imperio romano.

La novela se divide en tres partes: la primera habla de la manera de enseñar de Elizabeth Finch, de sus ideas y convicciones, también de la larga amistad que surge entre ella y Neil, con quien solía reunirse espaciadamente para comer, siempre a la misma hora y en el mismo lugar. Al morir, hereda a su alumno sus libretas de apuntes y sus libros, con los que él inicia el proyecto de escribir la biografía de esa mujer que le parecía llena de enigmas.

En la segunda, impulsado por el recuerdo de algunas clases y apuntes de Elizabeth, Neil investiga la vida de Juliano el Apóstata (331-363 d.C.), quien al asumir el trono renegó del cristianismo, impuesto por Constantino, para mostrar rotundamente su creencia en los dioses paganos. Fue al mismo tiempo un guerrero victorioso y un emperador tolerante con las demás religiones. Era culto, austero, modesto, eficiente, incorruptible, trabajador, dice el narrador, y en su aspecto personal descuidado y poco dado a la limpieza. Ambos, Elizabeth Finch y Juliano el Apóstata son los protagonistas de este libro irónico y erudito

En la tercera parte, una vez concluida su investigación sobre Juliano el Apóstata, Neil vuelve a hurgar en la vida de su maestra, de la que había estado enamorado; lee sus libretas, sus apuntes sobre Juliano y algunos otros temas de su interés, son textos breves y algunas veces se reducen a una línea o una sola letra. Recuerda un episodio infamante estando Elizabeth jubilada, cuando al dar una conferencia es malinterpretada y en la prensa no solo se burlan de ella, sino también la calumnias y tergiversan sus palabras. Eso motiva que deje de aparecer en público y cese sus de por sí escasas colaboraciones en algunas publicaciones.

Con esta novela, Barnes crea un personaje entrañable y al mismo tiempo realiza una crítica severa contra la intolerancia y las fantasías que pueblan la historia.

AQ

LAS MÁS VISTAS

¿Ya tienes cuenta? Inicia sesión aquí.

Crea tu cuenta ¡GRATIS! para seguir leyendo

No te cuesta nada, únete al periodismo con carácter.

Hola, todavía no has validado tu correo electrónico

Para continuar leyendo da click en continuar.