Tibu es el personaje detrás del éxito de grupos como La Guardia y Hombres G, un hombre desaforado que muestra las entretelas de un mundo tan complejo como seductor.
Tibu, memorias de un mánager, publicado por la editorial Malpaso, es el testimonio de Carlos Vázquez Moreno —llamado Tibu— sobre la época en que trabajó como músico, productor discográfico y, sobre todo, mánager de estrellas como Miguel Ríos, Aute, Marta Sánchez, Miguel Bosé y Javier Gurruchaga, lo que insufló su ego y le confirió un poder desmesurado.
- Te recomendamos 'La tierra baldía': el modo mítico Laberinto
En sus reminiscencias Tibu habla de su apuesta por la música, contra los consejos de su padre, un arquitecto franquista; recuerda su paso por el conservatorio de Madrid y su estancia en Venezuela, donde comenzó a tocar el bajo con el grupo Los Chicles; refiere su regreso a España y su incorporación a la troupe de Ramoncín, quien cantaba espantoso pero tenía pose de auténtico rockstar.
Bajista del grupo Banzai en los ochenta, como mánager Tibu supo y guardó numerosos secretos de pleitos, infidelidades, adicciones y negocios turbios; en su libro, denuncia ingratitudes y deja entrever, por ejemplo, una relación clandestina entre Marta Sánchez y Carlos Baute, quienes han afirmado que los estafó con las ganancias del tema Colgando en tus manos.
El libro es una especie de ajuste de cuentas con sus antiguos representados, especialmente con El Canto del Loco y su líder Dani Martín, quien lo envió a la cárcel cuatro años por defraudación. Fue en la cárcel —dice Tibu— donde comenzó a perfilar esta versión de su historia, en la que sugiere o revela intimidades sin importarle si afecta a terceras personas.
Tibu, memorias de un manager, una obra escrita con desorden y descuido, recorre la trayectoria profesional de un hombre que se ha enfrentado a golpes con la vida.
AQ