Una de las leyendas mexicas relacionadas con la destrucción del mundo, pues según los relatos de la antigua cultura prehispánica, esto seres buscan evitar el nacimiento del sol.
Las Tzitzimime son seres muy parecidos a Mictlantecuhtli, señor del Mictlan, en sus cuerpos huesudos llevan corazones humanos y manos en un collar que llevan en el cuello, con garras en sus manos y pies, con ojos en todas sus articulaciones; según los aztecas, habitaban en uno de los trece cielos.
Los aztecas creían que cada cincuenta y dos años se terminaba el ciclo solar, por lo que se llevaba a cabo el ritual del fuego nuevo, una ceremonia de las más importantes de la antigua cultura, pues de ella dependía el destino y supervivencia de los pueblos originarios.
De acuerdo con la historia, en dicha celebración se debía apagar la luz en todos los hogares, dejando únicamente el fuego que habría sido bendecido en el centro de la aldea, el cual prometía un nuevo comienzo. Los mexicas creían que si el fuego no era capaz de sobrevivir a la tempestad de la noche, significaría el fin de la humanidad.
Durante cinco días en fechas del fuego nuevo, ninguna persona podría salir de sus hogares, pues las tzizimimes rondaban por la tierra en busca de humanos, especialmente mujeres embarazadas, estas últimas eran quienes podrían convertirse en una tzizimime al ser atacada por otra.
Los relatos narran que las también llamadas Monstruos del Segundo Cielo bajarían del cielo a devorar a todos los antes de que un gran terremoto sacudiera la tierra y destruyera todo. También tenían la capacidad de marchitar las extremidades de quienes vieran.
También se cuenta que en el tiempo de los eclipses los antiguos mexicas usaban máscaras simbólicas de maguey, de pues se creía que con ellas se protegían cuando ellas bajaban con el fin de evitar el nacimiento del sol.
BAFG