De acuerdo con el vocalista Roger Daltrey, si The Who, grupo de rock fundado en 1962 como The Detours, ha tenido una trayectoria tan longeva —en la que perdieron la vida trágicamente dos de sus integrantes, el baterista Keith Moon (1978) y el bajista John Entwistle (2002)—, se debe a que “hay que poseer una cierta cantidad de locura”.
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En Mi historia: memorias del fundador de The Who. Gracias os sean dadas, Mr. Kibblewhite (Libros del Kultrum, 2019), Daltrey escribe: “Todos nosotros —se refiere a los rockeros— tenemos algo de locura en el interior y, en nuestro caso concreto, hasta en la superficie. Locura, ambición, ego, paranoia”, elementos que hicieron de sus conciertos una experiencia alucinante, una sobredosis de adrenalina.
Si uno de sus maestros de primaria, afirmó que el pequeño Roger “es un chico lleno de inquietudes, tanto pragmáticas como intelectuales, musicales y deportivas”, el profesor Kibblewhite opinaba lo contrario: “No llegarás a nada en la vida, Daltrey”.
El chico llegó lejos: a los 21 años grabó con The Who su primer álbum, My Generation, con una canción que se convirtió en un himno generacional con una frase lapidaria: “Espero morir antes de volverme viejo”. Desde entonces ha tenido que lamerse muchas heridas, pero ha llegado a viejo con entereza y un buen legado musical.
“Cinta adhesiva, parches, improvisaciones y rezos”, así describe sus primeros conciertos. “Está claro que eso definía el rock. Teníamos una ambición desmesurada y en el rock de los años 70 no había límites. Los Beatles eran un grupo de cuatro músicos que tocaban en medio de un estadio, lo que era ridículo, pero funcionaba gracias a la histeria. Nosotros no podíamos refugiarnos en la historia, teníamos que hacer algo más, teníamos que llenar el estadio”.
Con un disco nuevo a cuestas, Who, Roger Daltrey reflexiona: “Uno no se retira de este negocio, es el negocio el que te retira a ti. Puedes cantar y tocar notas, pero lo que no se puede hacer es fingir la intención de la música. Atribuyo esto a que sigamos teniendo éxito. Nosotros no fingimos. La química entre Pete y yo sigue siendo especial. Nacimos así y ahora The Who somos nosotros dos”.
CODA
LA MAGIA DALTREY/TOWNSHEND
Si en algo contribuyó al éxito del grupo fue la forma en la que Daltrey se ha apropiado de las canciones de Townshend. “Era consciente de que mi trabajo consistía en ser un portal de entrada a las palabras de Pete”, admite el cantante.