Elisa Salas celebra una década de trabajo con sus caligramas

La artista de la colección MILENIO Arte presenta una exposición con ocho caligramas y dos esculturas.

La artista celebra una década de trabajo con esta exposición | Foto: Cortesía Mirage
Ciudad de México /

Para Elisa Salas, la caligrafía es un arte que va más allá de la escritura; es un medio que le permite explorar su identidad y conectar con los demás a través de la belleza de las palabras. Es mucho más que una simple técnica de escritura; es una forma de arte que combina la expresión creativa con la precisión técnica.

La artista de la colección MILENIO Arte habla sobre su exposición 10 años de caligramas, en el foyer salón Chapultepec, del J.W. Marriot México. Dice que no sólo celebra una década de su trabajo, sino que también incluye la develación de su nueva versión de la escultura De jaula a pájaro I y su más reciente escultura en acero doblado: Sonograma de bandada de aves en expansión.

Para esta muestra retrospectiva y celebrar una década de trabajo, presenta durante 15 días, 10 piezas, una por cada año, incluyendo dos esculturas, una de acero y la otra de bronce, así como ocho caligramas, los cuales están formados con obras de su autoría y de sus poetas favoritos.

Foto: Cortesía Mirage

Ella comparte sus reflexiones sobre su arte, el proceso creativo detrás de sus obras y el significado de su última escultura.

“Los caligramas son imágenes conformadas por caligrafías, por textos, por palabras, en mi godete yo tengo palabras más que colores, debido a que las palabras son el hilo conductor para tejer y formar las figuras de mis obras”.

El uso de la luz

Desde el inicio, los caligramas le fascinaron porque combinan poesía y artes visuales. Al plasmar palabras que forman imágenes, siente que puedo transmitir emociones profundas. En esta década, ha explorado diferentes técnicas y estilos, desde lo estructurado hasta lo más libre y espontáneo. Cada obra es un reflejo de su evolución personal y artística.

Mi proceso varía según la obra. A veces empiezo con una emoción o una palabra que me inspira; otras veces es una imagen que tengo en mente. Por ejemplo, para mis caligramas, primero visualizo cómo las palabras pueden formar una imagen concreta”.

Asegura que sus obras con caligrafía son un espejo de su estado emocional: “Cada caligrama que realizo refleja mi interioridad; es una forma de comunicar lo que a veces no puedo expresar con palabras, esta conexión emocional se convierte en un elemento central de mi trabajo, donde las palabras se transforman en imágenes que evocan sensaciones”.

Habla especialmente de su escultura De jaula a pájaro I, la segunda versión de la obra de De jaula a pájaro, la obra que fue sustraída de su pedestal en la Alcaldía Miguel Hidalgo.

Su obra 'De jaula a pájaro II' es la nueva versión de una que fue robada. | Fotos: Cortesía Mirage

Esta escultura representa la figura de una niña con un hueco en el corazón, donde se queda grabada la forma de un colibrí, simboliza la vulnerabilidad y la capacidad de sanar nuestras heridas a través del autoconocimiento. Es un mensaje poderoso para empoderar a las niñas y recordarles que tienen un gran potencial dentro.

“La primera escultura la hice para hablar de la importancia de los derechos de las niñas, se inauguró, y días después fue robada, prácticamente arrancada de su base. Afortunadamente estaba asegurada y por ello, pude hacer esta versión mejorada”.

¿En estos 10 años cómo ha cambiado tu caligrafía?

"En este tiempo sí ha cambiado mi técnica, porque empecé haciendo caligramas con la escritura, la diferencia entre escritura y caligrafía es que en esta última ya hay una intención, una técnica y un control del pulso, y la escritura es una forma simple de expresión escrita con símbolos, pero no forzosamente busca la estética.
“Entonces mis caligramas de ahora son muy diferentes a los de hace 10 años, porque he cambiado la técnica, los temas y los tonos.
“De hecho, mis caligramas de 2024 tienen tonalidades del renacimiento, los fondos en color arena y también estoy empleando las luces, llevándolas al extremo, porque la razón por la que empecé en esto, es porque cuando vi los caligramas de Guillaume Apollinaire, me pareció que les hacía falta sombras y luces, por eso los empecé a hacer, y ahora ya estoy llevando la técnica al extremo porque al poner un fondo de tierra neutral, puedo ir a más capas de luz con más blanco y opacidades para tener mucho más volumen.
“Esta técnica de la caligrafía es una fusión de arte, cultura y técnica que ofrece infinitas posibilidades creativas. Es una forma de comunicación que va más allá de las palabras, permitiéndome explorar mi identidad y compartir mi visión con el mundo”.

hc

  • Leticia Sánchez Medel
  • letymedel@yahoo.com.mx
  • Reportera cultural, cursó la maestría en Periodismo Político, es autora de tres libros sobre la historia inédita del Cervantino.

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