El director del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Diego Prieto, anunció que el Museo Nacional de Antropología (MNA) —el más visitando de México—, abrirá sus puertas al público cuando el semáforo epidemiológico este en amarillo.
“Terminado la feria del libro se puede organizar un acto probablemente nocturno, porque nos interesa que vean la gran iluminación del patio central y la restauración de todo el estanque del MNA, y al día siguiente se estaría recibiendo a los visitantes, evidentemente con las medidas de la sana distancia. Será una gran sorpresa”.
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En su intervención, Antonio Saborit, director del MNA, comentó que la pandemia apareció en un momento en que preparaban una exposición de México en el extranjero en el Museo Etnológico Quai Branly, que estaría lista para el verano, pero se postergó para octubre.
De igual forma, anunció que la celebre exposición de Aztecas viajará a Viena para ser inaugurada el próximo mes.
¿Cómo afectó el recorte presupuestal al INAH?
Con un recorte presupuestal ordenado por mandato presidencial, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) ha sobrevivido realizando labores de gabinete y difusión virtual de sus labores, en un año en el que 75 por ciento de los recursos de todas las instituciones se destinaron para enfrentar los gastos generados por la pandemia de covid-19. No obstante, su director, el antropólogo Diego Prieto, es optimista.
Durante la presentación del programa de la Feria del Libro de Antropología e Historia, que se realizará del 5 al 9 de octubre, con la participación de 36 editoriales en el Museo Nacional de Antropología e Historia, el director del INAH dijo que “en cuanto al Presupuesto de Egresos de la Federación para el año 2021, apenas hoy la Secretaría de Hacienda y Crédito Público hizo llegar el Proyecto de Presupuesto de Egresos a la Cámara de Diputados, ahí nos vamos a enterar. No es mi facultad definir presupuestos para los ejercicios correspondientes, y ya
después daremos a conocer cómo el instituto sacará adelante el supuesto con el apoyo del presidente de México Andrés Manuel López Obrador. Este año complejo continuaremos con nuestro proceso de fortalecimiento”.
Precisó que el INAH en estos momentos ha reorganizado sus funciones, dado que con el recorte su presupuesto de 2020, que en un principio era de 3 mil 918 millones de pesos, quedó en 3 mil 171 millones de pesos. Sin contar las pérdidas que sufrieron al cerrar los museos y las zonas arqueológicas por la emergencia sanitaria, que les impidió poder captar recursos propios por concepto de taquilla.
En la videoconferencia de este martes, Prieto explicó que esta situación obedece a que “las prioridades presupuestales se han concentrado tanto en los temas de atención a la salud de los mexicanos, contagiados por la nueva enfermedad del covid-19, como en la solidaridad con los sectores de la población que se encuentra en circunstancias de mayores desventajas”.
Postura ante venta de documentos históricos
Diego Prieto, como director del INAH, fijó su postura sobre la venta de documentos históricos entre los que se encuentra una carta firmada de Miguel Hidalgo, que este martes se expenderá por Morton Subastas.
Explicó que, los documentos, que cuentan con una denuncia ante la Fiscalía General de la República, son para el instituto monumentos históricos.
Se refirió a la Ley Federal sobre Monumentos y Zonas Arqueológicos, Artísticos e Históricos, donde existe una diferencia entre los bienes arqueológicos y los históricos. Los primeros son propiedad de la nación, todos ellos inembargables e imprescriptibles y ajenos a cualquier acto de apropiación o de comercio. En tanto que los segundos, como bienes históricos, por supuesto que están protegidos por la ley, pero pueden ser susceptibles de apropiación privada, aunque no se pueden exportar.
“Lo que se tiene que hacer es demostrar cómo estamos haciendo el vínculo de estos documentos con archivos históricos, particularmente con el Archivo General de la Nación o con algún otro archivo. En ese sentido demostrando que pertenecieron a algún archivo histórico, por supuesto que podemos acreditar la comisión de algún delito”.
Por otro lado, dejó en claro que es obligación de estas casas acreditar la legal posesión de esos bienes.
Reconoció que están procurando alguna clase de apoyo para que en todo caso esos documentos se incorporen a los archivos históricos públicos como el AGN o la Biblioteca Nacional de Antropología e Historia.
PCL