En Notre Dame ya trabajan, pero aún no cuentan con el proyecto final de restauración

Darío Martos Carbonell, arquitecto especializado en restauración, cuenta que existe un escaneo de láser del techo tan preciso, que ayuda mucho en la labor.

El incendio de la Catedral de Notre Dame destruyó la aguja y el tejado (Reuters).
Ciudad de México /

A un año de que la Catedral de Notre Dame, en París, Francia, fuera devorada por un incendio, los especialistas aún no emprenden el proceso de restauración, debido a que todavía no se ha lanzado el concurso internacional de arquitectura, por el momento trabajan en la estabilidad del monumento.

Darío Martos Carbonell, arquitecto de la Universidad Politécnica de Valencia, con especialización en proyectos y patrimonio, y activo profesionalmente en la restauración de patrimonio en Ile de France, dice que este es un tema muy complejo, aunque asegura que se tiene la suficiente documentación para restaurar el tejado y la pluma de Notre Dame, de los que no queda nada por el siniestro. Por suerte hace dos años se hizo un escaneo de láser con una precisión de 3 milímetros de la techumbre, que era del siglo XIII, es decir ya tenía 800 años de antigüedad, dice a título personal el experto, que ha participado en debates sobre la restauración del emblemático inmueble.

Explica que cuando se quema o derrumba algo, los arquitectos especializados en la preservación del patrimonio tienen que seguir los protocolos estrictos.

“Le ponemos andamios para que todo se quede en su sitio y lo mantenemos así durante un año, debido a que durante un año todavía puede derrumbarse alguna de sus partes, debido a que con el frío o con el calor los materiales se dilatan y se contraen, por eso es necesario esperar, debe pasar un ciclo de cuatro estaciones, antes de eso no podemos saber realmente cómo está el edificio”.

Apenas el pasado 15 de abril se cumplió un año de la tragedia que afectó a Notre Dame, en teoría ya deberían haber acabado la fase de análisis de evolución del edificio, y empezar a trabajar en el proyecto de restauración, pero ante el confinamiento, hasta ahora, durante esta semana se han emprendido los trabajos de recuperación.

“De hecho, se quiere que Notre-Dame esté lista para los Juegos Olímpicos de 2024 pero ya veremos si se acaba o no, honestamente tengo mis dudas. Si se empieza a trabajar en la reconstrucción se empezará mínimo a partir de diciembre o enero del próximo año, antes lo veo muy difícil, honestamente”.

Reconstruir en acero, viable

Tras impartir el curso virtual de “Arquitectura en la transición del XIX al XX: de los historicismos a la negación de la historia”, del programa de Morton Subastas de acompañamiento en la cuarentena y su campaña en la espera digital covid-19, el experto, quien actualmente cursa un diplomado de especialización y profundización en patrimonio por la École de Chaillot, París, plantea la manera en que debe restaurarse la emblemática catedral.

“Estoy en plena discusión porque formo parte de la École de Chaillot, París, la escuela que forma a los arquitectos encargados de la preservación de los monumentos arquitectónicos de Francia, ya que ha habido muchas preguntas y muchas discusiones dentro de mi propia escuela, infinidad de debates y puntos de vista sobre la restauración y reconstrucción; para mí el proceso que deberíamos seguir es el mismo que se siguió con el Campanile de San Marcos, en Venecia, que se derrumbó de la noche la mañana y dos lustros después de muchas discusiones se reconstruyó justamente ‘donde estaba y como estaba’ creo que ese el camino a seguir para Notre Dame”.

Por lo que sugiere que la reconstrucción de la estructura de soporte del techo con el tejado se haga tal cual como era, en tanto que en el interior se podría hacer algo distinto.

“Por dentro, pensar en rehacer la techumbre de madera creo que sería anacrónico y no aportaría realmente nada, lo siento por los compañeros carpinteros de Francia, pero considero que reconstruir en acero sería más viable, soy más partidario del acero, lo podemos reconstruir con ese material porque cargaría menos el edificio y en mi opinión es más seguro.

También, planteó que hay que tener en cuenta una cosa, el acero no es tan seguro frente a los incendios, hay que tener eso en cuenta porque la madera se puede quemar pero el acero se funde, ese es el mayor problema que tenemos con Notre-Dame.

Además

La flecha que data del siglo XIX y que se quemó durante el incendio en Notre Dame ha generado mucha controversia, se está discutiendo sobre el proyecto de copiarla tal cual la hizo Violeta-le-Duc, cuando realizó su restauración o realizar un diseño nuevo.

vmb

  • Leticia Sánchez Medel
  • letymedel@yahoo.com.mx
  • Reportera cultural, cursó la maestría en Periodismo Político, es autora de tres libros sobre la historia inédita del Cervantino.

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