El Día de la Candelaria es una de las tradiciones religiosas más importantes en la cultura mexicana y el pretexto perfecto para realizar reuniones familiares y comer tamales; sin embargo, los cambios en los hábitos alimenticios por la pandemia también provocó una baja en el consumo de estas preparaciones.
De acuerdo con la investigadora de mercados Kantar, cada semana 30 por ciento de los mexicanos come tamales y 16 por ciento toma atole; pero si lo comparamos con lo que se consumía en 2020, bajó 4.5 y 7.4 por ciento, respectivamente.
La consultora aclaró que la disminución se debe a que menos integrantes del hogar comieron tamales a diferencia del atole que mantuvo su consumo.
Sin embargo, quienes sí siguieron disfrutando de este alimento subieron sus ocasiones de consumo 7.7 por ciento a la semana.
Verdes y de Oaxaca, favoritos
Los favoritos indiscutiblemente son los tamales verdes y los oaxaqueños, pero en los últimos nueve meses de 2021 aumentaron las ocasiones que comieron los de dulce (18 por ciento) y a la par los de mole y rajas (9 por ciento); tuvieron una caída de 8 por ciento aquellos donde el ingrediente principal fue la carne de cerdo o pollo, dijo Adrian Ávalos, Out Of Home de la división Worldpanel de Kantar México.
Las personas de 33 a 44 años comieron menos tamales, mientras que los más jóvenes, de los de 19 a 24 años dejaron de tomar atole (menos 4 por ciento); los niños de hasta 6 años incrementaron el consumo de ambos, opuesto a lo que pasó con los mayores de 50 años que bajaron la ingesta de los dos alimentos.