Durante la primera presentación de Alberto Barros en el Auditorio Nacional, en abril de 2022, la gente se entregó al Titán de la Salsa y, “eufórica”, se puso a bailar junto a sus butacas, por lo que en su nuevo concierto se instalará por primera vez en ese centro de espectáculos una pista de baile junto al escenario para celebrar este ritmo que, según el colombiano, da un mensaje de alegría, pero también de perdón.
El productor, arreglista, trombonista y cantautor vuelve al escenario de Paseo de la Reforma donde debutó con gran éxito el año pasado con su tributo a la salsa y la cumbia colombianas para una segunda edición “con 75 por ciento de salsa y 25 de cumbia”, ahora con invitados como Los Askis, un grupo de cumbia andina mexicana a cuya música Barros hizo arreglos para fusionar esa sonoridad con su estilo.
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El concierto se llevará a cabo hoy a las 20:30 horas, con un espectáculo que incluirá tres parejas de bailarines, además de los músicos que lo han acompañado en toda su carrera.
También participarán su hijo Elvis Barros, con temas urbanos y Colombianas Salsa All Star, su proyecto de estrellas femeninas de la salsa encabezadas por su esposa Luz Elena Restrepo, quien acompañó a la conferencia de prensa al artista nacido en Barranquilla el 30 de noviembre de 1957.
Barros y Restrepo dijeron haber superado su crisis matrimonial de 2022, que llamaron “un bachecito”.
“La presentación pasada fue todo un éxito, se quedó mucha gente fuera. La gente estaba un poco eufórica ese día. Yo todavía no lo he visto, pero (ahora) decidieron abrir una pista de baile (junto al escenario) y en los pasillos esta vez, para que la gente se desinhiba se conecte con todos nosotros. Estaremos brindando toda esta síntesis del tributo a la salsa y la cumbia colombiana”, expuso Barros.
En breve entrevista, planteó la necesidad de fomentar el baile de la salsa entre los jóvenes, como una forma de acercar a las nuevas generaciones al género, quienes a su juicio tendrán que hacer sus propias aportaciones. “Hay que seducir a los jóvenes a través del baile de la salsa, mostrarles también con imágenes la salsa, para atrapar su atención”, comentó el colombiano ganador del Grammy Latino.
Admitió que el tema que más le ha marcado porque nunca falta en sus conciertos es “Sobredosis de amor” y que le gustaría trabajar con mexicanos como Yuri, Marco Antonio Solís y Alejandra Guzmán.
En 1982, Barros fundó la orquesta Los Titanes, con los que popularizó temas como “Sobredosis de amor”, “La palomita”, “En trance”, “Compárame”, “Por retenerte”, “El mar” o “Levanta el cuero”.
—¿Se imagina un mundo sin salsa?
Eso no me va a tocar a mí. De alguna manera yo soy la salsa, o la cumbia. En mi entorno siempre estoy llegando a estos géneros. Y las nuevas generaciones están incorporando nuevas cosas, los jóvenes deben tomar el relevo, como se dice en el deporte, para que siga latiendo en generaciones venideras.
—¿Qué siente que el Auditorio por primera vez abra una pista de baile tras el éxito en su debut?
Me honra que haya hecho eso el Auditorio con mi música, es un privilegio que me llevo en el corazón, haber podido forjar una pista de baile, me honra de verdad. Es un homenaje a esta música que estamos haciendo, y vamos a echarle muchas ganas a este nuevo concierto.
—Si no cantara salsa, ¿qué otra cosa haría?
No me imagino haciendo otra cosa, sería especular, no me veo en otra profesión. Desde que tengo conciencia de mi existencia, de los 5 años, ya yo estoy con la música; a los 12 empecé a estudiarla. Mi papá (José) era compositor y mi mamá cantaba. La música estaba en todo lo que respiraba, era la vida.
—Para usted ¿cuál es el mensaje que da la salsa al mundo?
Cuenta varias cosas. Manda un mensaje de alegría, de romanticismo, canta al amor, a la reflexión, al perdón también. Habla de muchos temas y tiene ahí oídos para cada cosa que queramos decir.
PCL