La Segunda Guerra Mundial inicia tras la invasión de Alemania a Polonia, pero México, al igual que muchos países latinoamericanos, se mantuvo neutral. Sin embargo el tema de la producción petrolera va a ser fundamental, pues recién nuestro país había nacionalizado su industria y enfrentando de inmediato un bloqueo por parte de Estados Unidos e Inglaterra, por lo que se vería presionado en vender su producción; irónicamente, los primeros embarques de petróleo serían enviados a Alemania.
- Te recomendamos Con combustible salido de Tampico se ganó la Primera Guerra Mundial Cultura
Los aliados pronto se darían cuenta de la conveniencia de tener de su lado al gobierno mexicano y convertirlo en proveedor del energético, por lo que los estadounidenses realizan acuerdos para reanudar el abastecimiento, no así con Inglaterra que demoraría un tiempo más. Derivado estos acuerdos Pemex se hace de una flota para poder surtir los pedidos de crudo, muchos hacia la costa este de los Estados Unidos, siendo dos de estos buques objeto de ataques por parte de submarinos alemanes.
“El 13 de mayo de 1942 se da el hundimiento del Potrero del Llano, el primer buque tanque que hunden los submarinos alemanes, lo hunden frente a las costas de Florida y eso sacude la situación de México que se había mantenido neutral, situación que se complica cuando el 20 de mayo hunden el Faja de Oro”, relata el cronista tampiqueño.
Estos antecedentes marcaron la pauta para que el gobierno mexicano cambiara su postura de neutralidad, siendo el 28 de mayo a solicitud del presidente Manuel Ávila Camacho que el Congreso de la Unión aprobó por unanimidad el decreto mediante el cual se establecía que desde el día 22 de mayo de 1942 los Estados Unidos Mexicanos se encontraban en estado de guerra contra los países del eje que conformaban Alemania, Italia y Japón. Por su parte, la cronista maderense Carolina Infante señala que se existen documentos que aseguran que México llegó a vender petróleo a los japoneses en los primeros años de guerra.
“Se tiene registros que venían barcos japoneses a abastecerse durante la guerra, hablamos de un fuerte conflicto de tiempo y dinero, lo que gastaban por venir a cargar acá. Esto nos habla de un apoyo de alguna manera a países extranjeros, sin ser participe tenías una inclinación, por qué no irse a Venezuela, España o Israel que tiene petróleo”, indica.
Tras declararse la guerra a los países del eje México no contaba con los recursos para hacer frente a las potencias, por lo que su papel se limitó a ser proveedor.
“La participación bélica en el frente de batalla se dio con el escuadrón 201 ya hacia el final de la guerra en Filipinas, pero realmente en ese momento México no tenía medios para ir al frente de batalla en ninguno de los puntos donde había conflictos, entonces entra al lado de los aliados pero como proveedor, abastece de combustible”, indica Josué Picazo Baños.
Después de involucrase de manera indirecta en el conflicto, existió el riesgo de ataque a las refinerías para de esta forma mermar el abastecimiento de los países aliados.
“Madero en 1924 se convierte en municipio, en el 30 se eleva al grado de ciudad y apenas estábamos desarrollándonos como una capital petrolera, como una ciudad productora de petróleo, habían 2 refinerías la Francisco I. Madero y Pierce Oil Company de Árbol Grande y las que estaban en Matarredonda que se pretendían bombardear como la Huasteca Petroleum”, afirma Carolina Infante.
En Tampico había especial interés en que se implementaran medidas de protección por lo que se dotaron de piezas de artillería a la zona naval.
“Se hicieron prácticas de oscurecimiento: en las noches la gente debía apagar sus luces o cubrir las ventanas, por si hubiera un ataque aéreo o desde el mar”.