Qatar y México forjan lazos perdurables a través de la cultura, dicha colaboración no sólo celebra el patrimonio mexicano, desde el arte prehispánico hasta el muralismo, sino que promete impactos duraderos en educación, comercio y diplomacia, cómo un ejemplo de la forma en que la cultura trasciende fronteras.
Sobre esta relación y del hecho de que México y Canadá serán protagonistas en la iniciativa Años de Cultura de Qatar, en 2026, habla en entrevista exclusiva con MILENIO, su Excelencia Mohammed Al Kuwari, asesor cultural de "Años de Cultura" para América Latina y ex embajador de Qatar en México.
Al Kuwari se refiere a los orígenes de esta iniciativa nacida en 2012, su conexión con el espíritu unificador del futbol y los planes para 2026, un año que une el Mundial FIFA con vibrantes intercambios artísticos.
¿Cómo surgió la iniciativa Años de Cultura en Qatar en 2012?
Años de Cultura se lanzó en 2012 cuando Qatar recibió la candidatura para la Copa Mundial de la FIFA 2022. Todo comenzó con una idea muy simple: que la cultura es una de las formas más poderosas de unir a las personas. Qatar quería crear una plataforma que se centrara en intercambios reales entre personas, emprendedores, artistas, estudiantes, creativos, familias y comunidades.
Durante la última década, la iniciativa ha crecido hasta convertirse en alianzas con docenas de países de todo el mundo. Lo importante para nosotros es que no sean celebraciones de una sola vez. Cada Año de Cultura está diseñado para construir relaciones que perduren mucho más allá del año calendario mediante asociaciones institucionales, colaboraciones creativas o inversión y comercio.
¿Qué criterios se usaron para seleccionar a México y Canadá como países socios en 2026?
México y Canadá son países con identidades culturales increíblemente vibrantes y ecosistemas creativos fuertes. Comparten valores muy cercanos a los nuestros, como la inclusión, la herencia indígena y una fuerte creencia de que la cultura pertenece a todos.
También estamos entusiasmados con la oportunidad de asociarnos a través de nuestra conexión con el futbol. Qatar fue anfitrión del Mundial de la FIFA en 2022, y México y Canadá coorganizarán el de 2026. Esto lo convierte en el momento adecuado para llevar adelante el espíritu de unidad, diálogo y conexión.
¿Cuál es el calendario de actividades para 2026?
El programa se anunciará por fases e incluirá iniciativas clave de los Años de Cultura, como exposiciones, presentaciones, residencias artísticas, intercambio académico y eventos públicos de gran escala.
¿Habrá énfasis en expresiones culturales mexicanas específicas?
Por supuesto. El patrimonio cultural de México es increíblemente profundo y diverso, y nuestro objetivo es reflejarlo de una manera significativa. Estamos analizando un amplio espectro, desde tradiciones indígenas y prehispánicas hasta el muralismo y el arte público, pasando por el cine, la música, la fotografía, el diseño y la gastronomía. Se anunciarán artistas e instituciones específicas una vez confirmadas las colaboraciones. Nuestro enfoque siempre es colaborativo. Trabajamos estrechamente con instituciones culturales, embajadas, artistas y educadores para moldear programas juntos.
¿Cómo se financiará este programa?
Años de Cultura cuenta con una combinación de financiación pública, asociaciones institucionales, apoyo en especie y colaboración con el sector privado. Lo importante para nosotros es que el programa cultural siga siendo dirigido por la misión y accesible al público.
¿Cómo se conecta esto con el "espíritu de unidad" del Mundial 2026?
Años de Cultura añade otra capa a la ya unificadora experiencia de la Copa del Mundo, creando momentos culturales alrededor del torneo que unen a la gente fuera del campo. Estamos explorando arte público, festivales, charlas, proyecciones y celebraciones comunitarias que pueden celebrarse junto al calendario del fútbol americano y ampliarlo, ofreciendo espacios donde la gente puede celebrar valores compartidos, independientemente del equipo que apoyen.
¿Trabajan con la FIFA o con comités organizadores locales?
Estamos en conversaciones continuas con diversos actores, incluidas instituciones culturales y socios de la ciudad anfitriona. Las colaboraciones formales se anunciarán en una fecha posterior.
¿Qué impacto esperan y cómo medirán el éxito?
Para nosotros, el éxito se mide de diversas maneras. Analizamos cuántas nuevas colaboraciones se crean, cuántos artistas e instituciones siguen colaborando tras finalizar el año, y si el intercambio conduce a conexiones educativas, creativas o profesionales más profundas. También prestamos mucha atención a quiénes participan para asegurarnos de que el programa llegue a jóvenes, familias, estudiantes y comunidades.
¿Qué gana México con esta colaboración?
El programa ofrece una plataforma internacional para artistas, creativos e instituciones culturales mexicanas, especialmente en Oriente Medio. Años de Cultura abre puertas a nuevas colaboraciones, oportunidades de gira e intercambio creativo-industrial, al tiempo que despierta la curiosidad por México como destino cultural y turístico. Los beneficios de la colaboración se sostienen gracias a la visibilidad global de los artistas y creativos, así como a los lazos diplomáticos a largo plazo que se extienden más allá del año calendario.
¿Qué han aprendido de años anteriores de cultura, como Francia o India?
Cada año nos recuerda que la programación es más sólida cuando se desarrolla de forma colaborativa entre países socios. Cuando trabajamos juntos, somos capaces de crear programas impactantes y duraderos.
Cada año nuestro objetivo es tender puentes culturales demostrando cómo Qatar y nuestros países socios son más similares de lo que podríamos esperar. Por ejemplo, durante el Año de Cultura Qatar-India 2019, la Biblioteca Nacional de Qatar presentó Qatar, India y el Golfo, que exploró 4,600 años de historia compartida entre ambos países. Y en 2020, la artista qatarí Bouthayna Al Muftah se asoció con la fábrica francesa de alfombras Aubusson para crear un tapiz inspirado en la herencia Qatarí.
¿Cómo garantizarán que el programa sea inclusivo?
Para nosotros, inclusión significa accesibilidad en todos los aspectos, contenido, ubicación e idioma. Esto significa eventos públicos gratuitos o de bajo costo, programas educativos, talleres, activaciones al aire libre y colaboraciones con escuelas, universidades y organizaciones comunitarias. Por ejemplo, como parte de la colaboración de este año con Argentina, la iniciativa Qatar Reads de la Biblioteca Nacional de Qatar distribuyó casi 1,000 paquetes de lectura con cuentos clásicos árabes en español a estudiantes de toda Argentina. Se realizó un intercambio recíproco en Qatar, introduciendo a los jóvenes lectores a la literatura tradicional argentina.
También nos esforzamos por repartir la actividad entre varios locales y barrios, para que la participación no se limite a un sólo público o espacio. Cada año, ciclistas qataríes y ciclistas de los países socios realizan una ruta ciclista de varios días (normalmente de 500–600 km) llamada CultureRide. El grupo recorre una gran variedad de terrenos, desde grandes ciudades hasta pueblos remotos, para sumergirse en la cultura local, participar en talleres locales y reunirse con los residentes de la comunidad.