Una de las tradiciones mexicanas más especiales y que se ha popularizado al rededor del mundo en los últimos años es el Día de Muertos. La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) declaró a la festividad como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad el 7 de noviembre de 2003, con el fin de crear conciencia entorno a su valor y prevalencia.
La celebración se conforma de múltiples elementos con significados religiosos, prehispánicos y simbólicos, siendo uno de los más destacados la ofrenda de Día de Muertos. Es tal vez el componente más reconocible, pero ¿sabes colocar la ofrenda correctamente?
¿Qué significa la ofrenda?
De acuerdo con el Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI), la ofrenda de Día de Muertos se trata de compartir con los difuntos para honrar su vida; es el reencuentro de un ritual que convoca la memoria.
La ofrenda tal y como la conocemos el día de hoy es un reflejo del sincretismo del viejo y el nuevo mundo.
Elementos imprescindibles para recibir a las almas:
- Agua: Esta representa la fuente de vida, se ofrece a las ánimas laya que mitiguen su des después de su largo recorrido
- Sal: Elemento de purificación, sirve pata que el cuerpo no se corrompa en su viaje de ida y vuelta para el siguiente año
- Velas y veladoras: La flama significa la luz, la fe y la esperanza. En algunas comunidades indígenas cada vela representa a un difunto.
- Copal e incienso: Era ofrecido por los indígenas a sus dioses, se utiliza para limpiar al lugar de los malos espíritus.
- Flores de cempasúchil: Se acostumbra poner caminos de pétalos que sirven para guiar la difunto del campo santo a la ofrenda
- El pan: El ofrecimiento fraternal, se representa como el cuerpo de Cristo
FM