Herencia y querencias es el espectáculo con el que se conmemorará el aniversario 80 del natalicio del escritor y periodista Germán Dehesa Violante (México, 1944-2010), poseedor de una pluma exquisita y de un humor insuperable.
Ángel Dehesa, su hijo, dice a MILENIO que ofrecerá un gran show al lado de Virulo, el humorista cubano, comediante y cantautor con más de 50 años de trayectoria que trabajó mucho tiempo con su papá en la Planta de Luz en el show Con permiso.
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Los días 14, 15, 21 y 22 de junio en la librería Mauricio Achar, en Miguel Ángel de Quevedo 121, a las 19:00 horas, se recordará a Dehesa con risas, reflexiones, música y canto.
El periodista, cuya columna más conocida era La gaceta del Ángel, cargada de humor y sátira, nunca quiso aceptar un puesto en ningún gobierno ni administración y vaya que se lo ofrecieron. Nunca se dejó amedrentar a pesar de que lo llamaban para hacerlo, recuerda su hijo.
Dehesa dice que su padre podría reunir a personas de todo tipo de ideologías y estratos sociales, en favor de proyectos del bien común, colaborando con asociaciones civiles.
Comenta que a 14 años de su partida, mucha gente se acuerda de él con mucho cariño. Por ejemplo, el año pasado el Museo del Carmen le dedicó su ofrenda de muertos y el mudancero que acudió por las cosas para el altar, vio una foto y exclamó: “¡No me diga que este es su papá!”Ángel dijo que le regaló un libro de su padre a este hombre.
“Abrir nuevamente sus textos es algo muy importante porque la lectura implica un diálogo entre el autor y el lector. Podremos volver al origen porque Mauricio Achar, fundador de la librería Gandhi, un hombre que cambió la forma de vender libros en este país, puso un foro y cafetería que se convirtió en un centro de reunión de mucha gente del exilio español y de grandes intelectuales.
“Hacían desde tragedias griegas y ahí empezó mi papá a montar sus primeras pastorelas con tintes de sátira política, hasta que se fue al Unicornio y después a la Planta de Luz. Para mí volver a la librería Gandhi es muy significativo”, refiere Dehesa.
“El espectáculo conmemorativo en honor a Germán Dehesa consistirá en una conversación entre Virulo, mi papá, yo, así como la gente que acuda, en cuanto a que vamos a leer varios de sus artículos periodísticos que fui seleccionando, como la primera columna que hizo para el periódico Reforma en 1993 y, la última que fue en 2010, a pocos días de su partida”.
Dice sorprendido que después de haber revisado los textos de Germán Dehesa, se da cuenta que tienen una gran vigencia, debido a que muchas de sus columnas son muy entrañables como cuando realizó la descripción del Ángel de la Independencia, de cómo subía con su padre a la columna, o como cuando le tocó ver la cabeza de la Victoria Alada en el suelo a consecuencia del terremoto de 1957.
Incluso Dehesa Violante bromeaba de su experiencia de haber tenido un infarto: “'si me invitan a una casa me tienen que explicar el contenido de triglicéridos de lo que me van a dar de comer'. Usaba el humor para disfrazar ese miedo que también lo volvía humano”.
El columnista fue nieto del gobernador Teodoro Dehesa, personaje que becó a Diego Rivera para que se fuera a estudiar a Europa, y también quien despidió en el Puerto de Veracruz a Porfirio Díaz en su exilio, cuando zarpó en el barco Ypiranga.
—Como líder de opinión ¿qué hubiera dicho Germán de este proceso electoral del pasado 2 de junio?
La verdad no puedo hablar por él. Pero puedo decir que Germán Dehesa no creería en darle el poder absoluto a nadie. Cuando ese partido o corriente ha demostrado que no está dispuesto a escuchar a nadie. Si hay una pandemia no puedes destinar todos los recursos de salud a la construcción de un tren, y ahí están los mexicanos que fallecieron cuando se pudo haber hecho algo para evitar esa tragedia.
Era un hombre con un espíritu altruista, Germán Dehesa ayudó a la gente de Yucatán afectada por uno de los huracanes que por ahí han pasado. Cuando se inundó Tlacotalpan, que era para él un lugar muy entrañable, había juntado con sus amigos cierta cantidad de dinero para una planta potabilizadora de agua, pero el gobierno en turno, no lo permitió, porque ellos la compraron a tres veces el precio proyectado. Era tan importante ese sitio declarado Patrimonio Cultural de la Humanidad, que pidió incluso que fueran a dejar sus cenizas ahí, al río Papaloapan.
PCL