A un día de la presentación de Cervantes: El trágico sueño de la memoria, Leticia Alvarado, fundadora y coreógrafa de Tándem Cía. de Danza, conversó con MILENIO sobre la pieza que explora a Don Quijote, que se representará por segunda ocasión en el Palacio de Bellas Artes este 1 de agosto a las 20:00 horas.
“Nos pareció muy importante traer este personaje del Quijote a este momento porque la obra ya se había estrenado en 2016 hablando de lo mismo, de cómo la violencia nos va automatizando, nos va volviendo fríos, nos va volviendo ciegos y cómo este personaje nos trae aliento de esperanza, aliento de que se pueden resolver las cosas con voluntad de todos”.
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La historia, explicó Alvarado, es contada por ocho bailarines de distintas generaciones en más de 15 escenas, en contexto y como parte del 30 aniversario de esta compañía de danza contemporánea.
“Todas estas escenas son como un caleidoscopio de sueños, con imágenes que soñó el propio Quijote, el propio Cervantes también; y de pesadillas, de esta conexión que quiero hacer a partir de la realidad que vivimos, con esta esencia del Quijote, de Cervantes y de este mundo de sueños y pesadillas”.
Literatura y movimiento
¿Cómo se lleva el lenguaje literario al dancístico? La fundadora de Tándem Cía. de Danza respondió: “Son dos lenguajes distintos, la literatura y la danza son diferentes. La literatura tiene mucho detalle en su narrativa, hay muchos géneros; en la danza, es tomar esencias o posibilidades que dan las imágenes que se crean a partir de la literatura y transformarlos en movimiento, en escenas que signifiquen, acompañadas por la iluminación, el manejo del espacio, escenografía y la utilería”.
En ese sentido, agregó que “todo es un conjunto de elementos que se suman para crear estas metáforas, estas imágenes que se elaboran a partir de la danza. Se toma este personaje del Quijote, que es un héroe emblemático de la literatura universal y se trae al aquí y al ahora que estamos viviendo, y nos deja un mensaje esperanzador, nos deja luz para seguir adelante, para no desfallecer por las vicisitudes y las problemáticas tan serias que estamos viviendo, donde la violencia nos rebasa de manera terrible y cómo salimos todos los días a trabajar pero siempre con este temor de que vayan a suceder situaciones terribles”.
En el equipo también participan Ivonne Ortiz, en diseño de iluminación, y Aurelio Palomino, diseño de vestuario y escenografía. En cuanto a la música se podrán escuchar obras de Johann Sebastian Bach y Antonio Vivaldi, entre otros.
Y aunque están de celebración por tres décadas de vida, Leticia Alvarado admite: “Mantener una compañía de danza independiente es complicado porque es un trabajo que se hace diario y cotidianamente para tener los cuerpos afinados. Es como tener un instrumento de expresión, entonces hay que tener recursos para poder trabajar y mantener una compañía estable, pero además que se vayan empapando de la idea, del lenguaje, de las propuestas creativas escénicas, por eso significa muchísimo poder regresar a este recinto y esta celebración para Tándem”.
La agrupación continuará su festejo retomando piezas coreográficas significativas, las cuales serán anunciadas próximamente.
DAG