Es en el año de 1851 cuando se tiende la primera línea telegráfica en el país, conectando a la Ciudad de México con el estado de Puebla para después ser extendida hasta Veracruz. Diez años después esta naciente tecnología que permitía el envío de mensajes cortos con la característica más importante de la inmediatez llegaría a Tampico.
De acuerdo con el cronista Josué Picazo Baños, fue el ex cónsul de México en Nueva York, Juan de la Granja, quien impulsaría fuertemente la llegada de esta tecnología en nuestro país, la cual tuvo mucha utilidad en el ámbito comercial, pues por primera vez había la oportunidad de enviar un mensaje de forma inmediata entre grandes distancias.
En el caso de Tampico, comerciantes locales se interesaron en poder utilizar este medio de comunicación, siendo entre los años 1860 y 1861 que llega el telégrafo a la ciudad, quedando conectada con poblaciones como Ciudad Victoria, Tula y San Luis Potosí.
La utilidad de esta nueva forma de comunicación llegó a ser usada para el control y arribo de los barcos al puerto, siendo en 1875 que se instala una línea entre el vigía instalado en La Barra y la capitanía de puerto, para avisar de la llegada de las naves y prever el espacio que ocuparían en muelles, además de conocer los tipos de carga y hacer el envío de agentes aduanales.
Destaca el cronista tampiqueño la participación que tuvo Tampico en el desarrollo de las redes telegráficas del continente, ya que entre 1880 y 1881 se instala el primer cable submarino entre Estados Unidos y México, específicamente entre Galveston, Texas y Tampico, para después continuar hacia Veracruz y Coatzacoalcos. Esta línea cruzaría el istmo de Tehuantepec para llegar a Perú, años después a Brasil y Uruguay.
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Gracias a esta conectividad se pudo también enviar mensajes telegráficos a Europa, utilizando la red que se tenía con Estados Unidos.
“Desde 1850 y hasta 1992 las oficinas telegráficas utilizaron la clave Morse, que era un código basado en rayas y puntos mediante los cuales se cifran los textos; la llegada de la tecnología satelital relegó esta clave y empezó a utilizarse la transmisión de mensajes digitales”, explica el historiador tampiqueño.
Participación de capital privado
En otros ámbitos como en la industria del petróleo, en 1920 también se contó con la participación de empresas privadas que ofrecieron el servicio como la Compañía Telefónica y Telegráfica Mexicana, que se convierte en uno de los antecedentes de Telmex y que junto con el gobierno se dedicaron a instalar las líneas de este nuevo servicio de conectividad.
“La virtud principal del telégrafo era la inmediatez, a la par existió el correo y Tampico tuvo un avance al participar en las primeras rutas áreas postales”, afirma Picazo Baños.
La comunicación telegráfica fue importante hasta la mitad del siglo XX, ya que la llegada del teléfono termina por sustituirlo, al estar presente no solo en el comercio, sino también en los hogares.
Edificio histórico con 114 años
En la actualidad existe una oficina de Telecomm Telégrafos frente a la Plaza de la Libertad en el Centro Histórico de Tampico, mismo que data de 1908; sin embargo no siempre estuvo ubicada en ese lugar, pues para 1870 existió una en la misma calle Madero, entre Olmos y Colón.
El cronista de Tampico relata que el predio donde actualmente funciona la oficina fue años atrás ocupado por la primera Aduana Marítima a finales del siglo XIX, tras incendiarse este edificio, se trasladan de manera provisional a un inmueble en Villa Cecilia hoy Ciudad Madero, para finalmente instalarse en el actual edificio de la Aduana junto al río Pánuco construida a solicitud del presidente Porfirio Díaz.
Después del incendio de la primera aduana, el predio volvió a ser utilizado para la construcción de la oficina de telégrafos que tiene ya 114 años funcionando en ese sitio.
El telegrama sigue funcionando
Aracely Aguirre Guzmán es jefa de la oficina de telégrafos en Tampico y explica que continúan ofreciendo los servicios tradicionales que se establecieron desde su fundación, como es el pago de remesas nacionales e internacionales y, aunque mucha gente no lo sepa siguen manejando el servicio de telegrama, que son los mensajes de texto que se envían solo a nivel nacional. Manifiesta que el sistema de clave Morse tiene más de 40 años que ya no se usa gracias a la comunicación vía satélite.
Explica que para el envío de telegramas, las personas acuden a la ventanilla y le indican al operador que quieren hacer uso de este servicio, posteriormente dictan el mensaje y proporcionan el nombre del destinatario y el domicilio donde deberá ser entregado; se imprime el mensaje, lo revisa el cliente, se confirma y lo paga.
Actualmente el costo de un telegrama es de 23 pesos y permite utilizar de una hasta 30 palabras.
“La gente lo sigue usando si va a enviar una felicitación por cumpleaños, el Día de las Madres, el Día de la Amistad, como un detalle”, señala la jefa de telégrafos.
Expresa que básicamente es más utilizado por despachos de cobranza, ya que el telegrama tiene un valor probatorio ante un juez, por eso las compañías dedicadas al cobro de cartera vencida hacen uso constante de este servicio.
Reconoce que, a consecuencia de los avances tecnológicos como el teléfono celular y las computadoras, el telegrama ha quedado desterrado en lo práctico.
El banco de los pobres
Uno de los principales servicios que se pueden realizar a través de Telecomm es el envío de dinero entre una oficina y otra a nivel nacional, incluso a nivel internacional a través de Western Union.
Aracely Aguirre expresa que durante todo el año se reciben remesas principalmente de Estados Unidos, teniendo la ventaja a diferencia de otras instituciones financieras que en Telecomm no se establecen límites a pagar, mientras que otras entidades sí imponen esta cláusula.
Explica que tiene cerca de 30 años que se abrió el abanico de opciones que se ofrecen, entre ellos los servicios bancarios, por lo que desde esta oficina se puede acceder a todos los bancos para hacer pagos, retiros, pago de tarjetas de crédito, depósitos, teniendo convenios con las instituciones bancarias más importantes.
También se maneja la cobranza a terceros como agua, luz, teléfono, televisión de paga, algunos sin cobro de comisión y otros con comisiones bajas. Manifiesta que desde que se implementaron los programas sociales por parte del gobierno federal han tenido una participación activa realizando el pago de esos programas.
Dijo que normalmente atiende entre 50 a 70 personas al día, pero cuando hay disposiciones de “65 y más” reciben hasta 500 en la oficina.